En mayo de 2009, a Jorge Visbal Martelo no le tocó otra opción que renunciar a su curul como Senador que había obtenido por el Partido de la U. La Corte Suprema había decidido abrirle una investigación por los constantes rumores que lo asociaban con los grupos paramilitares de Sucre. Atrás quedó entonces un exitoso pasado que incluía el haber sido Presidente de Fedegán durante 13 años y Embajador de Álvaro Uribe Vélez en Canadá. Llegó al Congreso después de que murió Luis Guillermo Vélez, el titular de ese asiento.
En 1997, su nombre apareció asociado a esta temible máquina de guerra. La evidencia de su cercanía con Edgar Ignacio Fierro, mejor conocido como Don Antonio, lo condenaba. En el computador del jefe del Frente José Pablo Díaz del Bloque Norte de las AUC había una referencia a Visbal Martelo en una reunión con Jorge 40. El Senador salía referenciado como “el viejo”.
Las declaraciones de Salvatore Mancuso, obtenidas en 2010 desde una cárcel en La Florida, lo hundían aún más y fueron determinantes en 2018 cuando la justicia concluyó que Visbal Martelo tenía vínculos con paracos en el Norte del país y también fueron parte del arsenal probatorio que la Fiscalía terminó presentando en su contra.
Mancuso relató que por el año 1998, Visbal Martelo se reunía con los jefes más encumbrados de los paramilitares y quien era el Presidente de Fedegán se encontraba con comandantes como Vicente Castaño, Don Berna o Jorge 40 para llevarles las quejas de los ganaderos que se quejaban del abuso de poder de los paracos en su zona como el robo de ganado o cobros excesivos por cuidarlos del hambre de la guerrilla, que podrían interpretarse fácilmente como extorsiones.
Salvatore Mancuso también dijo que fueron cerca de 15 reuniones, sostenidas entre 1998 y 2005, y en algunas de esas ocasiones, no fue solo, sino que estuvo acompañado del exministro Sabas Pretelt de la Vega. Lo irregular de estas reuniones era la preocupación constante de Visbal Martelo por conocer de primera mano cómo iba la expansión paramilitar en el país.
En un artículo de Verdad Abierta publicado en 2012, se transcribe una declaración de Salvatore Mancuso en donde señalaba la labor que cumplía el Presidente de Fedegán con los paras: “El doctor Visbal (nos) traía informaciones a nosotros, sugerencias. No sólo informaciones: sugerencias sobre la posibilidad de algunos ganaderos que decían que sobre las áreas nuestras de influencia, donde tenemos presencia como ganaderos, donde estamos desarrollando nuestra actividad agropecuaria y tenemos demasiada presencia de guerrilla… ¿cuándo las autodefensas ingresarán a esas regiones?, Y nosotros dentro de los planes estratégicos que teníamos de crecimiento, pues se le explicaba al doctor Visbal Martelo cuál iba a ser el ritmo de crecimiento, si teníamos algún tipo de expectativas o de misión dentro de ese plan estratégico de crecimiento de llegar a esas regiones o si no teníamos expectativas de llegar hasta allá”.
Cuando fue condenado a nueve años de cárcel en 2018, el texto de la condena, que presentamos a continuación, hizo énfasis en las afinidades ideológicas que tenía el Presidente de Fedegán con las Autodefensas. Mientras fue congresista, le pidió al gobierno de turno, el de Andrés Pastrana, sustituir el Ministerio de Defensa por un Ministerio de Guerra dedicado a combatir con ferocidad cualquier fuerza insurgente.
Tres años después de haber sido condenado fue considerado como víctima del conflicto armado por la Unidad para la Atención y Reparación de Víctimas. Ahora, cuando Salvatore Mancuso aprovecha la última oportunidad que tiene para contar toda su verdad ante la JEP, su nombre vuelve a aparecer en los labios del Comandante paramilitar como uno de los puentes que tenían los ganadores con su maquinaria de guerra.
Esta es la sentencia por la que Jorge Visbal Martelo terminó condenado a nueve años de cárcel por la Corte Suprema de Justicia: Sentencia Jorge Visbal