Uno de los principales logros de la Alcaldía de Dumek Turbay en Cartagena finalmente terminará de materializarse este sábado cuando la empresa caleña Atila termine, después de ocho meses, de demoler el polémico edificio Aquarela. Desde que asumió el 1 de enero de este año, el Alcalde se ha dedicado a recoger las banderas de una lucha que comenzó la exministra de Cultura, Mariana Garcés, hace siete años en contra de una obra que, no solo obstruía la vista del Centro Histórico de la ciudad, sino que también tenía en riesgo el título privilegiado que ostenta de ser uno de los Patrimonios Históricos declarados por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
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Justamente, el fin del desmonte de los 27 pisos que tenía el edificio terminará coincidiendo con la celebración del aniversario número 40 del día en el que la Unesco, en el marco de la octava sesión del Comité del Patrimonio de la Humanidad que se llevó a cabo en Buenos Aires, decidió darle ese reconocimiento a Cartagena el 2 de noviembre de 1984, lo cual contribuyó a que la capital de Bolívar pudiera crecer como destino turístico.
Entonces, la organización internacional resaltó el hecho de que debía ser preservada para las generaciones futuras
Teniendo en cuenta esto, el alcalde Turbay tiene preparado un evento en el que aprovechará para celebrar los dos acontecimientos y que incluso contará con la presencia del ministro de Cultura, Juan David Correa, quien viajará directamente desde Cali después de concluir sus compromisos en la COP16.
El siguiente paso tras la demolición que comenzó el 28 de febrero pasado será el embargo del lote por parte de la Secretaría de Hacienda y garantizar la correspondiente indemnización a las personas que habían invertido en el proyecto Aquarela, lo cual fue justamente una de las principales razones que retrasaron tanto todo el proceso, además de la cercanía del edificio con cables de alta tensión. De igual manera, queda determinar qué se va a hacer con los escombros, para lo cual el Alcalde ya está coordinando con operadores de aseo para llevarlos a un sitio adecuado.
