Germán Efremovich, quien permanece en su casa de Sao Paulo, en detención domiciliaria acusado de un presunto soborno en Brasil, sigue moviendo cifras en su cabeza. Descartó la compra de Alitalia porque la decisión del gobierno italiano es nacionalizar la compañía pero pondrá a trabajar todo su músculo financiero en función de la capitalización de Avianca.
Efromovich está convencido que saldrá pronto del impasse judicial en el que se encuentra. "No voy a abandonar el trabajo que comencé en 2004". Ya se lo comunicaron a los abogados de la aerolínea que está amparada por la ley de quiebras, el Capítulo 11 en los Estados Unidos en el l Distrito Sur de Nueva York.