Aunque a Edgar Espinosa, ex integrante del Grupo Niche en la década de los 70, la droga le devasto la vida y lo llevo a ser un habitante de la calle, su talento nunca se esfumó. Deambulando por Bogotá, encontró una escuela de música y filtrando sus manos por entre la reja, dio toda una cátedra de como tocar el piano. Con un derroche de talento, demostró que aun sigue siendo un maestro de la música.