Sin duda, las aerolíneas de todo el mundo afrontan la peor crisis de su historia debido al impacto del coronavirus y la situación en Colombia no es ajena a la coyuntura, razón por la que las principales compañías en este sector ya evalúan cómo afrontarán la situación en el corto y mediano plazo.
En diálogo con Valora Analitik, Alfonso Ávila, presidente de Easyfly, explicó cómo se encuentra la compañía y el impacto que actualmente tienen, luego que se desplomaran las expectativas de inicio de año de un crecimiento del 33%, debido al Covid-19 y las restricciones de viajes en el país.
“Veníamos creciendo a un ritmo impresionante, donde 2019 fue particularmente positivo, creciendo al 65% en pasajeros, por lo que naturalmente las restricciones de la operación nacional han tenido un impacto muy grande para nosotros. Desde el 25 de marzo, tenemos cero ingresos, con costos fijos que no se pueden reducir, por lo que el impacto en caja es bien importante”, indicó Ávila.
En este sentido, explicó que actualmente no hay muchas opciones ante tal coyuntura, pero se ha trabajado con los empleados de Easyfly (cerca de 1.300) para establecer algunos acuerdos, “entendiendo muy bien lo que está pasando en el sector y que es algo que valoramos mucho por parte de todos”, a la vez que se está renegociando con todos los proveedores.
De esta manera, se trata de aminorar el golpe que representa el no tener ingresos en rubros como gastos de mantenimiento o derechos aeroportuarios, que equivalen al 40% de la totalidad de los gastos, por lo que ya se está planeando cómo implementar la reactivación tras el fin de la cuarentena obligatoria y las restricciones de viaje.
Esto pues Easyfly es una aerolínea que ha destacado por su acogida entre el sector empresarial del país y su cobertura en ciudades principales e intermedias, donde no llegan otras compañías.
“La reactivación será gradual y muy lenta, por lo que el primer mes (mayo) proyectamos iniciar con una capacidad del 30%, lo cual aún nos genera un déficit muy importante. Luego subiremos al 40% y hacia julio podríamos tener una capacidad de 60%, lo cual, sin embargo, no es suficiente”, reveló Ávila.
De hecho, bajo una visión optimista, Easyfly prevé que hacia fin de año se pueda estar en torno al 63% de capacidad operativa en sus vuelos, por lo que se acumularían pérdidas muy importantes.
Por ello, ante medidas y ayudas del Gobierno para el sector como el aplazamiento de pagos o acceso a créditos, indicó que en vez de solucionar podrían incrementar más los problemas, pues “son medidas muy tímidas que solo están aplazando las dificultades”.
Por ello, topes de créditos como los anunciados por Bancóldex de hasta $5.000 millones, para el sector de aerolíneas serían insuficientes pues “pueden quedar pequeños para compañías como la nuestra, en la cual requerimos créditos de $50.000 millones en adelante. Para el Gobierno y el país en general el servicio aéreo es un servicio público esencial, por lo que requerimos más ayuda ante esta situación”, agregó Ávila.
No obstante, también valoró medidas como la reducción en el IVA para los pasajes aéreos en Colombia hasta 2021 como estímulo a la demanda, pero que tampoco es lo suficientemente fuerte ante el desplome que viven las aerolíneas en 2020 y lo que vendrá con posterioridad.
De esta manera, Easyfly en vez de crecer un 33% este año, ve reducciones del 30% en su operación hacia final de año, incluso pasando la pandemia, por lo que deberá aplazar los planes de crecimiento, aumento de frecuencias y nuevas rutas, para llegar a un difícil equilibrio.
En este sentido, se evalúa la cancelación de rutas en ciudades como Popayán, Valledupar, Cartagena y Barrancabermeja próximamente, algo que aún está bajo revisión.
“Seguro van a surgir nuevas ideas o alianzas o en el sector, luego que pase esta situación. Pero ahora debemos organizar las prioridades y es una situación de sobrevivencia. Buscaremos salir adelante”, finalizó el presidente de Easyfly.