El clan más antiguo de la política de la Guajira, los Ballesteros Bernier, quienes desde el Partido Liberal han tenido control por décadas del poder regional y local, sufrió el más duro golpe de su historia. José María Ballesteros, gobernador de ese departamento hasta el 2015, fue enviado a la cárcel por presunta apropiación de dineros destinados a la prevención del virus del dengue. Chemita, como es conocido en la Guajira, es nieto del exgobernador José María Ballesteros, hijo de Jorge Ballesteros Bernier y primo hermano de Santa Lope-Sierra, mejor conocido como el hombre Marlboro.
Ballesteros había llegado a la gobernación en las elecciones atípicas que siguieron a la destitución de Kiko Gómez en el 2014 y pemaneció en el cargo 18 meses.