Es muy probable que el presidente Duque anuncie a las 8 de la noche en una alocución que no firmará la ley estatutaria de la JEP y ya tiene listas varias objeciones. El primero que salió a hacerle zancadilla a la ley estatutaria fue el fiscal, quien en una rueda de prensa aseguró hace varios días que dicha ley era inconveniente porque, básicamente le daba impunidad a las FARC y no le permitía a la Fiscalía investigar supuestos crímenes que se cometieron antes del primero de diciembre de 2016 pero se prolongaron en el tiempo. Sin embargo, lo que quedaría claro es que Martínez no está contento porque la Corte Constitucional, que declaró constitucional la ley, modificó los puntos que él previamente había sugerido cambiar cuando la ley hacía su paso en el Congreso. Si el presidente Duque presenta las 7 objeciones —que incluyen también los cambios propuestos por el uribismo— que tendría listas, lo hace por razones políticas y no jurídicas porque la Corte ya le había dado vía libre a la Ley Estatutaria. Pero no la tiene fácil, porque la ley volvería al Congreso, donde el presidente no tiene mayorías parlamentarias y retrasaría el proceso por lo menos un año, sin un panorama claro sobre los cambios que pretende hacer.
Estas son las objeciones del presidente:
- Los que se acojan a la JEP y reincidan serán excluidos de la justicia transicional.
- Permitir que la Fiscalía General de la Nación sí pueda hacer investigaciones contra quienes se hayan acogido a la JEP por delitos que hayan sido antes del 1 de diciembre de 2016 pero se mantengan en el tiempo.
- Eliminar amnistía para delitos de lesa humanidad.
- Eliminar las penas alternativas para delitos cometidos contra menores de edad y relacionados con violencia sexual.
- Eliminar la conexidad de delitos de narcotráfico con delitos políticos.
- Extradición de quienes se hayan acogido a la JEP e incumplan lo acordado.
- Marco de justicia diferencial al interior de la JEP para integrantes de la fuerza pública.
