Un pobre balance deja la gira europea que realizó la Selección Colombia femenina de fútbol, a solo tres meses de la cita orbital en Australia y Nueva Zelanda. Derrotas por 5-2 ante Francia y 2-1 contra Italia dejan en entredicho la preparación que lleva las cafeteras para un mundial de mayores al que regresan después de 8 años.
Improvisaciones en las alineaciones, fallas defensivas, falta de ritmo de gran parte de nuestras jugadoras y escasez de contragolpes han sido las causas por las que Colombia no mostró su mejor fútbol. Si bien se le iba ganando a Francia por 2-0 y se le igualó a Italia 1-1 con gol de Catalina Usme, la defensa se mostró nerviosa en momentos decisivos y las derrotas le pasan factura a un inamovible Nelson Abadía que cuida a sus "vacas sagradas" y se niega a llamar a referentes como Natalia Gaitán o Yoreli Rincón que pueden marcar diferencia en cada partido.
Tampoco ayuda mucho una liga femenina de solo 6 meses para las jugadoras del ámbito local, porque en poco tiempo no se puede llegar al nivel de una futbolista europea que compite durante 11 meses y muestra de ello la selección francesa que remontó el marcador en poco tiempo y acabó con el planteamiento táctico de Abadía que no pudo contener con la maquinaria ofensiva de la galas.
Así mismo sucedió con Italia, pero el juego de Colombia mejoró levemente. Lastimosamente Mónica Ramos terminó pagando los errores defensivos con un gol en contra suyo. Linda Caicedo fue bien referenciada por la zaga azzurri y Mayra Ramírez no encontró su sitio en ataque. Catalina Usme se destacó entre todas las jugadoras colombianas por sus 2 goles: uno ante Francia de tiro libre y el último contra Italia desde los 12 pasos.
Solo quedan 3 meses para el debut en el Grupo H contra Corea del Sur, y a Colombia solo le queda una ventana de amistosos antes de que Abadía dé los 26 nombres de las futbolistas que representarán a la tricolor en la cita orbital por tercera vez en su historia.
Hay que trabajar mucho en el juego aéreo, en los contragolpes y en encontrar un dibujo táctico para lograr más ocasiones de gol. Mientras la Federación siga en manos de Jesurún, no hay posibilidades de cambio ni de regreso de las que alguna vez alzaron su voz contra las injusticias y los abusos que se ventilaron en 2019, al punto de que Isabella Echeverri fue la más sacrificada y terminó retirándose del fútbol por la puerta de atrás.
El mundial no lucirá fácil para Colombia. Sobre la mesa el rival más duro es Alemania quien ha ganado dos mundiales y fue subcampeón europeo el año pasado, con jugadoras de estatura alta, veloces en los contragolpes y asfixiantes en las marcas. Se puede soñar con una clasificación a octavos si se le juega bien desde el primer juego ante Corea del Sur, y mínimo, arañar un punto contra las germanas. Marruecos es el último rival de grupo donde estaría obligada a ganar si se quiere soñar con la fase eliminatoria.
Ojalá que Colombia se siga midiendo con rivales de buen nivel de cara para el mundial y los Juegos Olímpicos del próximo año en París. De esa forma se sabe si Colombia aspira a grandes cosas, pero como va la preparación, falta mucho camino por recorrer.
Foto: Twitter (@equipedefranceF)