El municipio de Guaduas, ubicado a 123 kilómetros de Bogotá, aproximadamente 3 horas de camino, es el único pueblo patrimonio de Cundinamarca. Se destaca por su arquitectura colonial y por ser la tierra natal de Policarpa Salavarrieta, más conocida como ‘La Pola’. Los historiadores registran que este pueblo fue fundado en 1572 sobre el Camino Real que conducía desde Santa Fe de Bogotá hasta Honda, Tolima.
Visitar Guaduas es elegir descanso, pero también historia, patrimonio, cultura y una riqueza natural que le otorga su ubicación de privilegio al occidente de Cundinamarca, en un valle de la cordillera Occidental.
Calles empedradas y casas de fachadas blancas con puertas y ventanas de colores, hacen parte del patrimonio arquitectónico de esta población en la que los visitantes podrán encontrar una gran variedad de atractivos como la Plaza de la Constitución, la Catedral de San Miguel Arcángel, el Convento de la Soledad (donde actualmente funciona la alcaldía), la Casa de La Pola (declarada Monumento Nacional) y el Patio del Moro o Museo de Artes y Tradiciones.
Desde Bogotá el viaje en carro se toma por la Calle 80, pasando por San Francisco, La Vega y Villeta, en total hay dos peajes los cuales tienen un costo de 20 mil. Para ir hasta Guaduas en bus se debe ir hasta el terminal del salitre, el pasaje tiene un valor entre los 35 y 38 mil pesos.
Si desea hospedarse en Guaduas, existen varias opciones a tan solo unas cuadras del centro del pueblo, el valor por noche lo encuentra desde 60 mil pesos en adelante.
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Lugares que no puede perderse en Guaduas
- Plaza de la Constitución
En este lugar, que es el eje de la vida social y cultural de Guaduas, se encuentra una pileta construida en el mismo lugar que ocupó la fuente que abasteció de agua antiguamente a la población, y cerca de ella la escultura elaborada por Silvano Cuéllar de la heroína Policarpa Salavarrieta ‘La Pola’, nacida en Guaduas.
- Restaurante Casa Real
La casona que ahora alberga a este reconocido restaurante fue construida entre los siglos XVII y XVIII. Es un restaurante-museo en el que podrá ver muchos objetos originales de la época.
- El Patio del Moro
Esta casona del siglo XVIII conserva su estructura original, tanto en los pisos como en el enmaderado y los techos. Destaca el patio con el empedrado de la época.
- Casa de La Pola
A unas pocas cuadras de la plaza, se encuentra la Casa Museo de Policarpa Salavarrieta, lugar donde se expone la vida de ‘La Pola’ y donde se recogen las memorias de una de las primeras familias criollas del municipio guaduero. La entrada es gratuita y encontrará un guía turístico que le contará la historia de la heroína de la patria de una forma muy cercana y entretenida.