¿Dónde están los ingenieros civiles de Colombia?

¿Dónde están los ingenieros civiles de Colombia?

Puentes desplomados, deprimidos inundados, carreteras intransitables y edificios inservibles son algunos de los males que traen a colación esta pregunta

Por: Juan Camilo Ospina Deaza
marzo 20, 2018
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¿Dónde están los ingenieros civiles de Colombia?

Un profesor mío después de reparar su carro que se despaturró en una alcantarilla decía que Colombia es el país donde lo inverosímil se hace realidad y ¡tenía razón!  Es solo prender el televisor y ver las noticias para darnos cuenta de la dimensión no muy desconocida en la que estamos. Solo para demostrar lo anterior unos cuantos ejemplos: se inundan ciudades, los puentes se caen, los edificios se construyen chuecos y se derrumban, se prueban puentes con soldados y un largo etcétera. El presidente de nuestro país nos “tranquiliza” afirmando que la caída de un puente “son cosas que suceden” y el alcalde de Bogotá afirma “no hay que ser exagerados, el deprimido de la 94 solo se inundó dos horas”. Llama la atención el común denominador de estas noticias: la pésima calidad de las construcciones. Aquí es donde yo me pregunto: ¿dónde están los ingenieros que han diseñado estas grandes obras?

Profundicemos en algunos casos, el deprimido de la calle 94 con NQS fue inaugurado el 22 de marzo del 2017 y hasta el día de hoy se ha inundado al menos dos veces, tal vez ha sido lo más cercano al sueño de Peñalosa de ver a Bogotá como una ciudad europea, en este caso Venecia. En una entrevista que le realizaron a la directora de IDU cuando ocurrió la segunda inundación, ella contestó que había dos razones para el evento: la primera, que la persona encargada de activar las bombas de drenaje tuvo una calamidad y no estaba en el puesto; y la segunda, recordar que en Bogotá llovía mucho. Ante esta respuesta el entrevistador preguntaba si no tenían planes de contingencia, a lo que la señora muy indignada dijo que tenían plan B, C, D, E, F y que todos fallaron. Ella misma junto con otros 50 ingenieros diseñaron los planes de emergencia.

Ante estos hechos tengo dos preguntas, si todos sabemos que en Bogotá llueve mucho ¿por qué los ingenieros no pueden hacer de antemano carreteras que no se inunden? Y, a la forma del chiste con las bombillas, ¿cuántos ingenieros se necesitan para que un deprimido no se inunde? Decir que la culpa es de la naturaleza es un recordatorio constante de la incompetencia de los ingenieros para prever este tipo de situaciones. Eso sería como decir que una casa se derrumbó no por el mal diseño o construcción, sino por los fuertes vientos. Bajo este panorama, uno en Bogotá no sabe si salir en bicicleta o en canoa.

Ahora hablemos de puentes, Santos dijo que las obras de la vía que comunica a Bogotá con Villavicencio no tenían nada “que envidiarle” a las de otros países porque son “puentes similares a los que encuentra uno en Suiza, en Alemania, en los Estados Unidos”, “es más, esto es una demostración de la calidad de nuestra ingeniería porque esto es ciento por ciento ingeniería colombiana”, pero como dice el dicho: la lengua es el azote del cuerpo y hasta donde tengo conocimiento los puentes de esos países no se caen de esa manera. Para los que creen que este es solo un caso aislado, tomemos del montón. En el 2015 se desplomó un puente peatonal en el costado occidental de la carrera 11 con calle 103, en el norte de Bogotá. La construcción estaba sin estrenar. Fue una obra que los militares hicieron con Construtec, empresa de obras civiles, y tenía como fin comunicar los dos costados del Cantón Norte, donde están la Escuela Superior de Guerra y las viviendas fiscales de los militares. Para probar el puente, a un oficial se le ocurrió la gran idea de subir soldados en vez de material inerte. El puente se cayó y muchos quedaron heridos.

Es curioso, pues uno esperaría que en pleno siglo XXI la tecnología y la técnica estén lo suficientemente adelantadas como para dejar obras decentes. Nadie duda que el problema sea la corrupción, pero hay que ser muy mal corrupto para robar y dejar una prueba tan evidente del crimen, ¿no  se puede robar y dejar una edificación en pie? Gracias a esta situación en Colombia no conocemos que es una carretera plana o que las tapas del alcantarillado estén al nivel de la vía. Recorrer Colombia se parece más a subir en un juego mecánico que a manejar por una carretera, por eso yo me pregunto ¿dónde están los ingenieros de Colombia?

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