¿Dónde están los adiposos comentaristas que decían que era un ex jugador? ¿ A quién se le olvidó el enganche que hace para el gol contra el Chelsea, contra el Bilbao, contra Paraguay, contra Independiente, contra Barcelona? Era el más grande de nuestros goleadores, el que empató solito el partido contra Chile en Barranquilla, el que nos dio la clasificación al último mundial. Es el hombre que más ha hecho goles en la Copa UEFA, es el hombre que más goles a marcado con la camiseta de Colombia. Y aun así no le agradecimos nada y esa lesión en enero del 2014 lo arrancó de los corazones de los colombianos.
E hicimos memes con sus nuevos peluqueados y lo chiflamos en la Copa América del 2015 y nos avergonzamos porque hizo un solo gol en su paso por el Chelsea y creímos que era un paquete, que era un invento de los medios, que era un modelito más y nos olvidamos que nunca ha pisado este suelo un deportista más profesional que él, sólo Nairo habrá podido llegar a cotas de sacrificio tal altas como las que ha dado éste joven nacido en Santa Marta que, sin un talento natural descollante como el que han tenido Asprilla, Willington Ortíz o Juan Guillermo Cuadrado, ninguno de nuestros jugadores se ha destacado tanto, nadie ha marcado sus goles, nadie ha valido tanto.
Y regresa metiendo en la Champions League con el Mónaco. Él sólo con su categoría, con sus pases magistrales. Falcao no ha sido un goleador cualquiera. Basta recordar este gol contra el Barcelona:
O esta pintura contra el Athletic de Bilbao en la final de la Europa League:
Falcao está de vuelta. Ya dirán que su lesión es la confirmación de que es un exjugador. Fue un tirón, una dolencia muscular. Lo cuidan, tranquilo que lo están cuidando, porque se viene una temporada colmada de partidos. Falcao es un grande de Europa y está dispuesto a partirse el lomo para lograrlo. No necesita demostrar nada, ya saben que es un grande. Lo necesitamos de vuelta para que con sus goles y su liderazgo vayamos al mundial de Rusia con la holgura con la que lo hicimos en Brasil. El país debe estar de fiesta, el Tigre ha vuelto a rugir.