Amado y odiado por los colombianos, Jesús Hernán Orjuela es el sacerdote más mediático y polémico de Colombia. Todo comenzó con su programa ‘Cura para el alma’ que transmitía el Canal RCN y que le consiguió tantos fieles que ya no cabían en su iglesia ubicada en el barrio de Castilla de la ciudad de Bogotá. Eran tantos que comenzó a celebrar las misas en la calle, incluso complicando el tránsito de la localidad. Situación que duró un año y que solo pudo ser prohibida por una orden judicial. ¿Dónde está el Padre Chucho en estos días?
Su fama trasciende fronteras o, al menos, así lo parece si tenemos en cuenta que, para cuando se escribe esta nota, el Padre acaba de llegar de un viaje de dos semanas a la ciudad de Los Ángeles (USA). Partió hace dos semanas, el día 14 poco después de terminar esa misa tan especial que hace todos los meses a las 4:30 de la tarde y que dedica al señor de los milagros para ofrecérsela a los enfermos. Los detalles de la ceremonia son tan cuidados, que si alguien quiere ir a fotografiarla o a filmarla debe gestionar un permiso. Siempre está a reventar.
En la actualidad es cantante y youtuber de música católica. Entendió que no necesita depender de la televisión para ser una estrella y por eso hasta sus ceremonias mensuales las transmite a través de su canal oficial. Cuando el mes pasado, pasó por una delicada cirugía de ojos, no faltaron los mensajes de aliento en sus redes. También ha hecho exorcismos, y según Yina Calderón, hace poco ella acudió a él buscando este servicio. Ahora la influencer considera que la ayuda que necesita es la espiritual.
Lo mismo pasará un par de semanas más tarde, cuando ladrones armados entren a la Parroquia Jesús Misericordioso y se queden con bienes que sumarían aproximadamente 15 millones de pesos. Meses atrás también había sufrido otro robo, parece haberse convertido en victima recurrente debido a que en este momento se encuentra invirtiendo en mejoras para el lugar.
Pero, aunque el sacerdote manifestó sentirse triste por los atracos, en los que no solo perdió elementos de valor sino a los que les tiene un gran aprecio personal y entre los que se encuentra un cáliz traído de Roma, Jesús Hernán Orjuela está más sano y activo que nunca. Sueña con ser santo y sin importar si tiene posibilidades reales para conseguirlo, ese deseo funciona como un poderoso aliciente para que siempre continue sorprendiéndonos.
Recordemos que hace más de 20 años sobrevivió luego ingerir, parcialmente, una copa que contenía cianuro. Eso podría calificar como milagro.