Desde que tengo uso de razón me han tratado de dividir socialmente, ya sea un equipo de fútbol o un partido político, ¿tendrán muchas similitudes? Esto no es más que una estrategia de dominación: “en política y psicología, divide y vencerás o dividir para reinar, es ganar y mantener el poder mediante la ruptura en piezas de las concentraciones más grandes, que tienen individualmente menos energía”.
Este comportamiento no es nuevo a nuestra especie y en Colombia particularmente. No hace muchos años grupos de campesinos se mataban entre ellos simplemente por ser liberales o conservadores. Mientras tanto sus “líderes” se repartían el poder y el país, beneficiando a sus familias que simplemente habían corrido con la suerte de ser hijos de nobles españoles. Aunque esta realidad sigue vigente en nuestra sociedad actual, se ha trasladado un poco a otros espacios como las redes sociales, pero lo triste es que en el fondo seguimos divididos por ideas y pensamientos que no son ni siquiera propios.
No es difícil romper el ciclo, si tienes la fortuna de poder leer mis palabras ya tienes una primera herramienta que te permite acceder al conocimiento. Vivimos en una era diferente, donde el internet nos ha permitido un mayor acceso a la información, pero también genera demasiada información falsa, así que lee muy bien lo que la gente comparte e investiga siempre el origen de cada idea.
Es importante entender la siguiente premisa: la verdad absoluta no existe, cada persona tiene su verdad de acuerdo a su experiencia con el mundo, no todos nacemos en condiciones iguales. Sin embargo tu puedes salirte de tu posición y tratar de entender la verdad de otros, de esta manera conciliar y llegar a un punto medio, con el respeto al otro como base de cualquier relación.
Entendiendo esto, mi consejo es que no confíes en su totalidad en ninguna fuente de información, lee varias versiones de cualquier acontecimiento y saca tus propias conclusiones, solo de esta forma serás realmente un ciudadano libre, que toma su propias decisiones.
Se aproxima nuevamente un periodo electoral e igualmente fútbol (que coincidencia). Mi invitación es que si llegas a tener algún tipo de discusión política, que sean los argumentos los que te acompañen, y no tus emociones y las ideas que alguien más ha puesto en tu mente.
No coloques ninguna etiqueta a nadie, no caigas en el juego de izquierda y derecha, de comunismo y socialismo, de castrochavismo y todos esos términos que muchos repiten pero que ni siquiera entienden su significado. Si eres una persona que tuvo la fortuna de estar educado, aprovéchalo para que sean tus conocimientos y experiencias las que te lleven a tomar decisiones.
Finalmente, acepta a las personas que piensan diferente, cada uno ha tenido sus propias vivencias que lo han llevado a identificarse más con alguna corriente o pensamiento. Recuerda que en el fondo ni esa persona, ni tú tienen la razón, sino que cada uno desde su propia perspectiva está tratando de encontrar un espacio en el mundo. Ambas posiciones son válidas y solo aceptarnos y encontrar un punto medio es lo que va permitir que todos vivamos en paz.
