El gobierno de la Bogotá Humana a través del IPES, ha apoyado a más de 2.500 unidades productivas de víctimas del conflicto armado con programas de emprendimiento, empleo, impulso comercial, formación a la medida e impulso económico en especie.
El Plan Padrino es una estrategia de acompañamiento y seguimiento dirigido a las unidades productivas que ya han recibido impulso económico, con el propósito de hacer sostenibles sus procesos de fortalecimiento empresarial y consolidación comercial.
De acuerdo con el director del Instituto para la Economía Social, Camilo Gómez Castro, solo en el 2015 más de 830 unidades productivas recibieron recursos de fortalecimiento representados en insumos hasta por $10 millones para unidades productivas individuales y hasta $ 45 millones para unidades productivas asociativas, así como herramientas de emprendimiento y fortalecimiento. “Con el plan padrino, realizaremos un acompañamiento especializado por 6 meses a estas unidades, para la consolidación de sus proyectos productivos en su fase de puesta en marcha y operación del negocio, mediante asesoría empresarial personalizada y especializada, con el fin que los recursos invertidos garanticen su sostenibilidad económica” aseguró el funcionario.
“Me dieron insumos por 45 millones, representados en una máquina lavadora, secadora, y clasificadora de naranjas, así como canastillas, básculas y fruta, con los cuales he podido impulsar mi Comercializadora de Cítricos “El Progreso”, beneficiando con ello a 6 familias más”, manifestó Efraín Buitrago, desplazado de Paujil (Caquetá).
Del grupo de víctimas, hacen parte asociaciones y/o colectivos conformados por indígenas, afrodescendientes, artistas, personas con discapacidad, artesanos y mujeres, entre otras, preseleccionados/as por la Alta Consejería para los Derechos de las Víctimas, la Paz y la Reconciliación de la Alcaldía Mayor de Bogotá.
“Con estas estrategias de emprendimiento, buscamos consolidar a la entidad como instrumento para la construcción de paz y facilitar la restitución de los derechos de esta población, mejorando sus condiciones socio económicas, mediante el fortalecimiento de sus unidades productivas, impulso comercial y generación de estrategias de emprendimiento” concluyó Camilo Gómez Castro, director del IPES.
Durante seis meses, estas personas han recibido acompañamiento psicosocial; capacitación en emprendimiento, mercadeo, producción y calidad, organización y gestión, aspectos normativos, acompañamiento y asesoría para la consolidación de su negocio, recursos representados en insumos y materia prima, y la posibilidad de obtener crédito con tasas de interés subsidiadas.
