El alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, ha impulsado una forma de gobierno que le ha costado parte de su popularidad y aprobación. La cultura de la legalidad, las multas, los desalojos y las sanciones, sustentadas con una invitación al orden, han despertado incomodidad en ciudadanos que tenían la ilegalidad acostumbrada a su vida cotidiana.
Algunas decisiones están aplicando mano dura a la “Cultura del Atajo”. El profesor Antanas Mockus la mencionó en su anterior Campaña Presidencial, apoyando modelos que modifican el comportamiento ciudadano y hacen pedagogía de lo perjudicial que resulta el “creerse más listo” y no someterse a las imposiciones sociales. “La Cultura de la Ilegalidad”, “La Malicia Indígena”, aplaudir al más “avispado” o al que se salta la norma, encontrar el quiebre al sistema, “Hecha la ley, Hecha la trampa” o la frase “El vivo vive del bobo”, son pensamientos heredados de sociedades tercermundistas que impiden progresar en temas ciudadanos.
La cultura de la ilegalidad convierte a los ciudadanos en cómplices. Bogotá debe hacer una transición de la Cultura de la Ilegalidad, a la Cultura Ciudadana. De la apropiación de ciudad con sentido de pertenencia, a una ciudad con sentido de competencia. La Capital de Colombia debe proyectar orden y dar ejemplo a las demás ciudades del país.
Las decisiones radicales implican una transformación lenta y permanente que necesita del apoyo de todos los ciudadanos:
- El Fin del Bronx. Lugar de comodidad para el crimen oculto a los ojos de las autoridades. Aunque el desalojo generó controversia por un aumento de percepción de habitantes de calle, se acabó con una república independiente en un lugar donde se facilitaba el microtráfico, los robos, las desapariciones, las violaciones y la trata de niños. Este lugar blindado por la ilegalidad multiplicaba la delincuencia común dentro de la ciudad. La Secretaría de Integración Social todos los días impulsa labores que buscan recuperar la vida de los 1.200 habitantes que frecuentaban el lugar. Aún quedan 300 habitantes que no han aceptado hacer parte de los programas de integración.
- Desalojo de Vendedores Ambulantes. Personas que ocupan ilegalmente el espacio público para comercializar productos. Esta acción protege la democracia urbana y va detrás las mafias que se lucran vendiendo o arrendando espacios que en realidad son de todos los ciudadanos. El IPES (Instituto Para la Economía Social) continúa ofertando trabajos formales a estas personas. Es una labor extensa debido a que en Bogotá hay aproximadamente 48.000 vendedores ambulantes.
- Limpieza de Puentes, Columnas, Laterales y Fachadas de Patrimonio Vandalizadas con Graffitis o Rayones. La Ley establece que debe prevalecer el interés general sobre el interés particular, al ser un bien público no se deben hacer intervenciones sin una respectiva autorización. Al ser un bien privado existir un común acuerdo entre el artista y el propietario del inmueble.
- Multa a Empresas que hacen uso de Publicidad Ilegal contaminando con Vallas y Pendones. Existen normas que regulan la publicidad en Colombia, por tanto saltarse estas normas estimula un aumento en la presencia de contaminación visual.
- Inmovilización a Vehículos Mal Estacionados. Este es un ejercicio de conciencia y cultura ciudadana que va detrás de las excusas. Una pedagogía a largo plazo que explica cómo “parquear un ratico” afecta la movilidad.
- Demoliciones de Propiedades que han construido ilegalmente en los Cerros de Bogotá. Saltarse las licencias de construcción propició una expansión que hizo colapsar la ciudad en algunos sectores.
- Desalojo de Invasiones, Cambuches y Asentamientos. Casos como el de los “Chachivacheros” en el Ricaurte dieron con la detección de drogas y armas blancas, y permitieron la recuperación del espacio público, o el desalojo de cambuches en los Cerros Orientales lograron proteger el patrimonio natural y cultural de la ciudad.
- Cierre de Empresas Contaminantes. Multa y cierre de empresas que han impactado negativamente el medio ambiente. Se ha aplicado mano dura a la Minería Ilegal y a contaminadores de ríos o humedales. En estos operativos se han visto afectadas empresas privadas, Universidades e incluso Centros Comerciales.
- Dispositivo para Identificar Colados en Transmilenio. Esta es una de las tantas acciones que buscan disminuir la cifra de colados en Transmilenio. Debemos apoyar el comportamiento en otros países, donde las personas simplemente pagan porque es lo correcto y lo que corresponde.
- Presencia de la Policía. Aumento de número de policías en puentes peatonales y estaciones de Transmilenio haciendo constante revisión de documentos de identidad. Es necesaria la presencia de la institución para identificar a personas indocumentadas o con antecedentes judiciales.
@SebastianRued12
