Entre 1898 y 1902 se respiraba un ambiente solitario y triste en el Carnaval de Barranquilla a causa de la guerra de los Mil Días. En esos años se suspendieron todos los eventos, menos los bailes populares.
En 1903, cuando llegaba a su fin dicha guerra, el general Heriberto Arturo Vengoechea organizó otra batalla, pero de las flores, como símbolo de paz, declarando que se realizaría en horas de la tarde del día sábado.
La primera batalla se efectuó con coches halados por caballos adornados con flores naturales, artificiales y con hermosas alegorías.
Como toda batalla, los carruajes eran puestos en filas y se organizaban bandos. El primero era liderado por el presidente o presidenta de la junta del carnaval. En ese entonces no se elegía reinas. El segundo bando lo encabezaba el vicepresidente de la junta, ministros y el público general.
Las balas y las bombas que lanzaban las líneas de combatientes entre sí, al encontrarse en esa nueva batalla, eran de bombones, bolsas de confetis, polvos de colores y flores.
Con telas importadas de Europa, los asistentes a la Batalla de Flores llevaban disfraces que elaboraban con meses de anticipación. El nuevo evento del carnaval iniciaba en el Club Barranquilla, que quedaba en la esquina del callejón de don Esteban Márquez en el Camellón Abello (actualmente Paseo de Bolívar) hasta el cuartel, dando la vuelta al bulevar, así lo decretó el general Vengoechea.
Con el transcurrir del tiempo, la Batalla de Flores se convirtió en el evento principal y representativo del Carnaval de Barranquilla, y es el más anrtiguo de todos los eventos carnestolendos.
En el presente se realiza la Batalla de Flores anualmente, los cuatro días antes del miércoles de ceniza, es decir: 2,3,4,5 de febrero.
Se pensó que el carnaval celebrado en 2020 que iba a ser el último en la Arenosa, por la llegada de la pandemia del coronavirus que ocasionó una parálisis mundial. Al año siguiente, en vista de que los contagios y las muertes por el virus iban en aumento, el gobierno da rinda suelta a los eventos, clases y trabajos virtuales. Indignados quedaron los barranquilleros porque no es lo mismo vivir y disfrutar de un carnaval presencial que virtual.
Después de un año de ausencia obligada, vuelve el Carnaval de Barranquilla con su derroche de colores y sabor con su tradicional Batalla de Flores, en donde desfilaron por la emblemática vía 40, disfraces, comparsas y carrozas en donde los distintos artistas, cantantes, reinas de belleza, modelos, actores, políticos, entre otros, de Colombia y extranjeros deslumbraron a los espectadores, quienes disfrutaron en compañía de sus amigos y familia, ubicados en los también tradicionales palcos, bordillos y sillas de la magia que emite la Batalla de Flores.
Durante el recorrido en el cumbiodrómo de la vía 40 pude darme cuenta de que los carnavaleros disfrutaron de su batalla de flores, algunos hasta montados en las copas de los árboles.
El evento inició a partir de las 12:00 m, como lo había anunciado Carnaval S.A.S, y culminó al rededor de las 6:00 p. m.
Las calles de Curramba estaban convertidas en ríos humanos, que hasta el amanecer pusieron en práctica el lema característico: ¡Quien lo vive es quien lo goza!
En la ciudad los eventos carnestolendos continúan hasta el martes 29 de marzo, día en el que los carnavaleros despiden las fiestas del Dios Momo, enterrando a Joselito, y preparándose para gozar de pincipio a fin el Carnaval de Barranquilla 2023.
