Tras debatir y analizar las palabras claves de meritocracia y privatización corresponde ahora analizar el mito del libre mercado, el libre comercio y la libre competencia.
Una vez se debate los conceptos sobre meritocracia y se desmitifica la empresa privada, lo recurrente es acudir al “Dios Mercado” atribuyéndole a este una serie de poderes divinos para solucionar todos nuestros problemas. Para invocar a este Dios, se practican los mantras libre mercado, libre competencia, libre comercio. Pero en realidad lo que ocurre es que esto no es más que juegos del lenguaje para ocultar una concepción de la economía al servicio de los mas ricos. Dicho de otra manera, estas son artimañas del lenguaje, para garantizar que los pobres sean cada vez más pobres y los ricos, cada vez más ricos.
Tras muchos años de supuesta aplicación de estos mantras, lo que tenemos en la actualidad es que el 10 % de la población concentra el 90 % de los bienes y riquezas del mundo, mientras el 50 % de los más pobres tan solo tienen el 0.2 %. En definitiva, eso del libre mercado, la libre competencia y el libre comercio es un cuento “chino” nunca mejor dicho. Su aplicación no se traduce en bienestar y desarrollo armónico con el planeta, por el contrario, genera desigualdad, hambre y miseria.
En definitiva, tenemos que trabajar por construir un modelo económico al servicio de los intereses de la humanidad, entendido esto como el desarrollo y la convivencia armónica con el resto del planeta.