Derechos de la mujer como prioridad en la sociedad
La violencia contra las mujeres es un resultado de la desigualdad entre género (hombre-mujer), caracterizada por la diversidad de formas en que se expresa, tanto en el ámbito público como el privado. Existen formas de violencia hacia las mujeres que no se reconocen y quedan invisibles como un fenómeno o problemática social, estas formas han sido vistas como normales evitando la conciencia y alimentado la incredulidad ante las voces críticas que trabajan en pro de los derechos de las mujeres.
Carmenza Alarcón Ávila, trabajadora social egresada de la Universidad Externado de Colombia, su experiencia desde que se graduó de la universidad ha estado alrededor de las mujeres, su primer trabajo fue como coordinadora del Proyecto de artesanos en el Museo de Arte y Tradiciones Populares, trabajo en la Secretaria de Integración Social como coordinadora operativa en la localidad de Suba siendo nombrada asesora de la primera junta administradora local donde conoció a la edil Martha Arjona y les nace la idea en conjunto de crear La Casa de la Mujer como un proyecto de apoyo para las mujeres. Esta líder dedicada a difundir y hacer valer los derechos humanos en la sociedad colombiana nos cuenta la importancia de crear un pensamiento en la sociedad donde la equidad de género se reconozca y se acepte no solo a nivel nacional si no también internacional.
1. ¿Qué cree usted que es necesario para que en Colombia haya una igualdad de género, y que hace falta para lograrla?
C.A.A: Este es un tema que se ha dado a través de la historia, nuestras abuelas y nuestras mamás tuvieron que calladamente aceptar situaciones porque era una filosofía no solo desde el hogar si no desde lo religioso, que la mujer debía casarse y seguir al hombre son toda esta clase de tradiciones culturales que hacen pensar que las mujeres están hechas para unas cosas y los hombres para otras, todo este machismo que se da genera una cultura patriarcal donde concibió que las mujeres debían estar en lo privado solamente para estar en el hogar y los hombres eran los que podían salir, transmitiendo así de generación en generación frases como que los “hombres son para la calle y las mujeres para la casa” “no llore, no sea nena” son dichos que acostumbramos y normalmente se repiten sin ver que se está transmitiendo toda una concesión de qué es ser hombre y qué es ser mujer, es por esto que a la mujer se le ha visto como la figura débil, la que debe ser sumisa.
Es necesario que en el país las leyes también le favorezcan a las mujeres, teniendo las mismas oportunidades que los hombres, sin seguirla viendo como sujeto al servicio de otros. Y aunque se ha ido avanzando en varios temas como la planificación y el trabajo, aun hay que reforzar e incentivar para que las leyes sean un tema de equidad de género en cualquier ámbito.
2. Aunque en el 2013 la violencia hacia las mujeres se redujo en un 35.6% con respecto al año anterior, este fenómeno sigue latente en nuestro país ¿Por qué cree usted que no se ha terminado con él y que se necesitaría para hacerlo?
C.A.A: Es necesario replantear, reconstruir y transmitir a las nuevas generaciones y a los antiguos que no se es más hombre por ser violento con las mujeres y que la violencia genera pérdidas para el país porque una mujer que ha sido violentada es una mujer que se enferma, que deja de trabajar trayendo consigo perdidas económicas para el país, porque si una mujer tiene una incapacidad deja de producir desde el punto de vista capitalista ocasionando pérdidas y generando gastos en salud, haciéndole un daño no solo a la mujer como mujer, sino también a su familia a la comunidad y con ello a la sociedad porque está violentando lo más sagrado que es la mujer. La violencia es algo cultural y por tanto hay que trabajarlo desde la cultura, y desde la infancia trabajando todas las generaciones para ir logrando evitar la violencia.
3. ¿Qué avances legales se han realizado en Colombia para tratar la violencia en las mujeres? ¿Qué conocimiento tiene usted sobre estas leyes?
C.A.A: Claro, nosotras las del movimiento de mujeres que venimos desde los años ochenta, comenzamos con la Casa de la Mujer de Bogotá hemos ido trabajando muchas leyes a favor de las mujeres, tenemos la ley de economía de cuidado y para este caso concreto se trabajó en una bancada de mujeres que se sigue trabajando en el congreso y en el senado para lograr y buscar hombres amigos para lograr la aprobación de la ley 1257 que nosotros le llamamos la ley de la no violencia contra las mujeres, esta ley aprobada en el 2008 es una ley donde se empieza a mirar que la mujer no solamente hay que valorarla porque es parte de la familia, también se empieza a mirar a la mujer como mujer, y se empieza a mirar los diferentes tipos de daños pero también las alternativas al nivel del estado, qué hacer cuando una mujer es violentada y qué hacer cuando una mujer está en peligro de muerte.
4. ¿Qué obligaciones debe asumir el estado con respecto a la protección de los derechos de la mujer?
C.A.A: La ley 1257 dice que función tiene cada uno de los ministerios, que función tiene el Ministerio de trabajo, de seguridad social, de vivienda, a cada uno le delegan funciones pero también cuando se hace el plan de desarrollo y los encuentros ciudadanos las mujeres debemos decidir qué queremos que vaya en el plan de desarrollo y en que queremos que se invierta el presupuesto, no solo llegando solamente a los encuentros ciudadanos sino también haciendo un seguimiento en el plan para saber en qué se está invirtiendo la plata. Hoy en día afortunadamente existe la Secretaria de la mujer que es un avance y un gran logro que le permite a la mujer participar en todo este proceso. El estado debe garantizar que las leyes que favorezcan a las mujeres se cumplan en su totalidad.
5. ¿Cuáles son las normas y principios que guían el trabajo de la Casa de la Mujer de Suba?
C.A.A: Nuestro mayor trabajo esta sobre los derechos humanos con perspectiva de género con enfoque diferencial, enfoque de derechos con equidad de género que son los parámetros en que nos concentramos, nuestro trabajo está en velar por los derechos de las mujeres y es por lo que tenemos varias áreas de trabajo, tenemos abogados, psicólogos, trabajadoras sociales, hacemos asesorías individuales y colectivas, también lo que es el área económica donde se le da la oportunidad a las mujeres de capacitarse para lograr un trabajo y de que reciban asesoría para colocar su propio negocio.