Llevamos ya tres semanas de paro nacional y las protestas con tintes violentos han pasado a ser marchas pacíficas en donde se rescata la unión del pueblo colombiano y se muestra rechazo frente al modo en que los políticos se burlan del país aprobando leyes que nos perjudican.
Por eso he llegado a la conclusión de que la única manera de cambiar el rumbo de Colombia es que los ciudadanos nos tomemos el poder. ¿Cómo?
A través de una asamblea nacional constituyente por medio de una consulta popular o referendo. Ya es hora de que los organizadores del paro unifiquen sus ideas y lleven a cabo dicha labor como lo hizo Claudia López con la consulta anticorrupción.
Desde 1991, el Congreso se ha dedicado a autolegislarse y a realizar cualquier cantidad de leyes que han frenado el desarrollo y la prosperidad de este país. Por ende, la única manera de darle un giro a la situación actual del país es a través de una asamblea nacional constituyente, que a mi parecer se debería realizar de la siguiente manera:
1. Bajar el gasto público del Estado y acabar con la corrupción.
2. Realizar una reforma tributaria que facilite la inversión, el crecimiento de las pymes y la generación de empleo con un ingreso digno.
3. Hacer que la justicia funcione y sea eficiente y eficaz.
4. Mejorar la calidad de la salud y la educación.
5. Realizar un plan de desarrollo a cincuenta años con astucia y ambición.
Es hora de que los colombianos les quitemos el poder a los políticos y hagamos leyes que le den grandeza a Colombia.
¡Viva la constituyente!