Desde siempre había sido notorio que los neoliberales se sentían dueños del mundo, algo así como “seres de mente superior”; y sus maneras de ser reflejaban ese pensamiento: desvergonzados, cínicos, prepotentes, neomamertos; es decir, habría una forma cultural del ser neoliberal.
Ahora con el neonaturalismo parecen haber encontrado la satisfacción de sus egos. Claro, hablo de los capitalistas neoliberales, no de los instigadores neoliberales que embarcados en la política, nunca han hecho empresa, pero acolitan su dominio. Con el advenimiento del neonaturalismo ya casi son “seres demente superior” pues pregonan en aras de defender a ultranza el criterio inalienable de propiedad privada, que los que la prohíjan son más inteligentes y por lo tanto son ricos porque toman mejores decisiones económicas en virtud de supuestos poderes y propiedades aclimatados en la cultura. Es decir, fascismo puro.
Una prueba de esos seres demente superior sería Donald Trump, por supuesto. Y en Colombia ¿tienen algún nombre en la punta de la lengua? ¡Si! ¡Ese es! ¡Ese es! ¡Que le pongan la corona!
Y lo peor del caso es que una reciente investigación indica que el estatus socioeconómico (SES por siglas en inglés), estaría conllevando a una respuesta genómica a través de un indicador de metilación en los grupos conocidos como CpG: “En comparación con un SES alto, un SES bajo se asoció con un aumento de la metilación en 1777 sitios y una disminución de la metilación en 769 sitios. El análisis de enriquecimiento funcional identificó una representación excesiva de vías biológicas relacionadas con la función inmune, el desarrollo esquelético y el desarrollo del sistema nervioso”. Por lo tanto se concluye: “El estado socioeconómico predice la metilación del ADN en un gran número de sitios CpG en todo el genoma”.
Son las dos caras de una misma medalla de cómo la influencia del SES invade la respuesta del genoma.
Esto desbarataría la teoría neoliberal del neonaturalismo, pero además demostraría una serie de crímenes ocultos del neoliberalismo: se está convirtiendo poco menos que en una fuerza que, no precisamente por selección natural, propicia lecturas diferentes al interior del genoma.
Por otra parte permitiría descifrar si algunos neoliberales lo serían realmente o simplemente son pelechadores que no alcanzan a eludir la metilación según sea su SES. Más precisamente, los neoliberales pueden ser catalogados según si responden o no a la metilación de los grupos CpG de sus genomas.
Es para reírse: no basta tener dinero ni propiciar políticas neoliberales, para serlo si tu genoma no lo indica eres un simple farsante, quizás un histrión. Esto por alguna vía demostraría que las concepciones filosóficas de Byung Chul Han tendrían un soporte científico. Puede leerse tu capacidad de histrión a través de la respuesta de tu genoma.
El asunto es que si “el estatus socioeconómico (SES) es un poderoso determinante de la salud (…), ahora se ahonda en “los mecanismos biológicos subyacentes”, investigando “los niveles de metilación del ADN en los sitios CpG en todo el genoma están asociados con SES”
Pero qué quiere decir la “metilación del ADN”. Extracto de Wikipedia: “La metilación del ADN es esencial para el desarrollo normal y se asocia con una serie de procesos clave, incluyendo la impronta genómica, la inactivación del cromosoma X, la represión de elementos repetitivos, el envejecimiento y la carcinogénesis”. Esto podría significar que si el ADN metila es porque de alguna manera se están activando los procesos arriba señalados, lo que significa que el genoma está reaccionando de manera defensiva ante los ataques a que está siendo sometido por factores externos.
No creo que haya pasado desapercibida la inactivación del cromosoma X en la metilación del ADN: “La inactivación del cromosoma X es un proceso multiepigenético estrechamente ligado al desarrollo embrionario, que involucra el silenciamiento transcripcional de uno de los dos cromosomas X en las células de hembras mamíferas”.
Acerca de las implicaciones del cromosoma X, sigo leyendo: (…) En el cromosoma X se encuentran genes que expresan enzimas clave en el metabolismo de carbohidratos y nucleótidos entre otros, y que impactan la viabilidad embrionaria y la proporción de sexos”.
“El sistema normativo neoliberal establece límites, hasta dónde puede ir una democracia, y les es absolutamente indiferente lo que diga el Parlamento. Adoptan este sistema con entusiasmo porque les permite experimentar con nuevos tipos de mercado, nuevas formas de conducta empresarial así como saciar las necesidades de los consumidores. En ese sentido, adoran la democracia. Pero cuando la democracia toma conciencia que tanto los mercados como la propiedad pueden ser contraproducentes, la tolerancia de los neoliberales por la democracia se desvanece. Rápidamente intentarán normativizar a nivel constitucional las prácticas y los límites de la democracia. Y lo hacen de tal manera que favorecen a los ricos frente a los pobres y reproducen un sistema basado en la competencia en lugar de la equidad económica y social”.
La lectura cruzada de las influencias de la reacción genómica y la naturaleza protectora neoliberal de un estado fuerte implica que la sociedad, y en general todas las especies, estarían siendo sometidas a un creciente estrés múltiple de variables asociadas que tenderían a modificar de alguna manera la evolución natural. Nótese que la metilación del ADN está referida simplemente a lo de SES, sin involucrar otras potenciales reacciones, potencialmente más agresivas, como la modificación medioambiental que trae asociado el neoliberalismo del Cambio Climático.
No está claro si las sociedades humanas responderán de una manera activa a que el neoliberalismo se convierta en una fuerza natural.
Sobre este particular podría haber algún aliento nuevo: “Y esto me lleva hablar de lo más extraordinario que ha ocurrido en EE. UU. en los últimos meses: Alexandria Ocasio-Cortez. Es una chica de ¡29 años! que hace un año era una camarera y desde hace unos meses es la congresista más influyente y ha conseguido poner en el centro del debate un tipo impositivo marginal del 70% para los más ricos. Y Edward Luce, columnista del Financial Times en EE. UU., diciendo que tiene razón. ¡Es increíble! Ya nadie compra la idea que hay un acuerdo que lo impide y que las manos están atadas. Todo está abierto, lo que es muy peligroso, pero también muy emocionante”.
¡Amanecerá y veremos!
Notas. He sido afortunado en leer casi al unísono: Desde su origen, el neoliberalismo responde a la pregunta de cómo proteger el capitalismo de la democracia, entrevista a Quinn Slobodian, aparecido en la revista Sin Permiso, a propósito del libro Globalists: The End of Empire and the Birth of Neoliberalism (Harvard University Press, 2018) y el novedoso estudio Análisis genómico de la metilación del ADN en relación con el estado socioeconómico durante el desarrollo y la edad adulta temprana, leído en el American Journal of Physical Anthropology, que es el diario oficial de la sociedad norteamericana del mismo nombre. Las otras citas están validadas.