Nota ciudadana
1. Como los buses del Transmilenio siempre, a toda hora, pasan llenos, o al menos eso parece, a ciertas horas, cuando no lleve el cupo completo, ubícate en la puerta de modo que no le permitas el acceso a ninguno de los incautos que tienen la esperanza de subir.
2. Si eres joven, o acompañante sano, cuando tengas que ir a los consultorios médicos, que casi siempre están llenos, haz caso omiso de los pacientes que con dolencias y caras de dolor esperan al menos paliar la larga espera sentados. Mientras tanto finge estar durmiendo o muy distraído jugando o chateando. Por supuesto, haz lo mismo en el transporte público.
3. Como eres un buenazo, siempre da tu firma cuando te la pidan en la calle, sin importar que sea para tumbar a un político, darle el aval a un narco reencauchado, rechazar a los gordos o ensalzar al dueño de una pirámide. No debe importarte que piensen que eres un idiota o al menos un irresponsable con tus datos.
4. Vota por el primero que te ofrezca un tamal, una cerveza o una teja. Si te dicen que es un corrupto, no le pongas atención, lo que vale es que al menos te den el transporte de ida al sitio de votación. Eso sí, para que no digan, quéjate después y despotrica del que elegiste. Eso lo hace todo el mundo.
5. No te sientas mal si llueve y tu barrio se inunda porque arrojaste basura a las alcantarillas, tiraste envolturas por las ventanillas del bus, echaste los colchones y muebles viejos a las quebradas. Para eso está la caridad del Estado o de los buenos ciudadanos que no hacen lo que tú hiciste; así que no te preocupes, alguien va a desinundar tu casa o te va a dar enseres nuevos.
6. No vayan a creer que es un problema de la personalidad o de falta de identidad, nada más bonito que ver el nombre de cada uno escrito en las paredes (ojalá recién pintadas), los monumentos públicos, los árboles, los baños. Ten bien presente que es todo un orgullo que los demás sepan que estuviste allí.
7. Haz ruido, aquí somos personas alegres, así que satisface a todos y grita, pon música hasta la madrugada, sitúa tu carro al frente del edificio donde vives con la música a todo volumen, si es reggaetón mejor. Si sabes que hay alguien enfermo, hazlo con más frecuencia, así le alegrarás la vida un poco. Eso sí, no pases inadvertido y no dejes que tu buen gusto musical lo haga.
8. Como para eso está el Estado, trata con rudeza todos los bienes públicos. Rompe los vidrios de los colegios donde estudias, daña las canastas para la basura de los parques, saca a tu perro a que ensucie sin compasión los prados donde juegan los niños, pisotea los jardines y ojalá arranques unas flores para llevárselas a tu novia, aunque como cargar es jarto, bótalas a la alcantarilla cuando te aburras de ellas.
9. Una persona puede ser malvada, odiosa, detestable, perezosa, inescrupulosa, pero si está afiliada a alguna religión o secta siempre será perdonada, eso la exime de la responsabilidad de portarse bien, así que perdona a todos, menos a los ateos, librepensadores, intelectuales, agnósticos, porque esos sí son la verdadera plaga.
10. Opina de todo y sin responsabilidad. Irrespeta lo que piensan los demás. Si es posible, escribe en las redes sociales, eso sí con mala ortografía, sin tildes ni comas, todo tipo de insultos y groserías, eso te hace simpático y popular.
