Esta semana transcurrieron las manifestaciones de forma pacífica durante el día, y en el atardecer y cierre fue cuando se generaron los desmanes, en su gran mayoría, el reporte de los daños y lesionados se los dejamos a los medios; en este caso, quiero hacer énfasis en que una vez más no se llegó a un centro de diálogo y discusión; así mismo, creo que cayó en saco roto toda esta jornada de manifestaciones a la vida, a la indignación, al resentimiento, ese resentimiento que se tiene por el desapego de las instituciones y del gobierno, hacia su pueblo, otro tema que le corresponde a los medios noticiosos, que cada día suele ser más escandaloso y amarillista.
Considero que este debe de ser un tema en la agenda de cada candidato a la presidencia: realizar un análisis a fondo de las problemáticas que se están expresando, como el estallido social debe de ser un tema acogido en sus propuestas, estas deben ser claras, tienen que tener una agenda realista, con un balance de justicia y equidad; el hacernos de la vista gorda y darle pañitos de agua tibia no va a servir de nada; aquí no podemos seguir hablando de qué lado o bando somos, somos un solo pueblo y punto, de seguir así, solo genera que la olla a presión llegue al punto de no más retorno y Dios no quiera tengamos un nuevo Bogotazo.
La captura de la ciudadana estadounidense debe de ser una llamado de atención, un encendido de las alarmas, para el gobierno; hasta el momento lo que se ve es que se pretende criminalizar a quien hace su derecho a la protesta, espero por el bien de todos, a que se sigan adelantando las investigaciones y se aclare todo, pero si se demuestra que realmente ella es un criminal, esto mostraría que se está gestando una organización, que puede no tener una cabeza, pero sí muchos tentáculos y puede escalar en un conflicto mayor.
Como siempre digo, espero solo ser un ave de mal agüero y que este equivocado; la forma de solucionarlo viene por parte de la institucionalidad y se redoblen los esfuerzos por combatir la corrupción, el clientelismo y la injusticia social.
Lo que nos queda es que todo esto es una jornada más de muchas protestas sociales, donde las víctimas de muchas injusticias sociales; y uno que otro que perdió a sus seres queridos en la pandemia, acudieron a manifestase y expresan su dolor, donde después de una temporada de pandemia las personas pueden salir y gritar sacar toda esa ira, recordar a los que se fueron y no pudieron despedirse o darles sagrada sepultura, se unieron en una sola voz pidiendo, clamando por los que no están, por justicia, porque sean escuchados y que este gobierno demuestre que es para y por el pueblo.