La campaña electoral para la presidencia en el 2022 no puede ser de lugares comunes, sino de una lucha ideológica intensa acerca de la concepción del Estado y la sociedad, precisamente ahora que la senadora María Fernanda Cabal está en el partidor de las candidaturas. El dilema para el próximo año será entre una democracia imperfecta pero persistente y una dictadura comunista con todo el horror que ello representa, especialmente para los más pobres.
Y los grandes medios de comunicación tan dados a frivolidad tienen ahí un tema importante para salir del marasmo descriptivo y entrar en el análisis profundo con el fascismo y el marxismo, que pertenecen a la matriz hegeliana, pero el senador Petro utiliza el término fascismo para enlodar a sus rivales o hace mención del nazismo que también es hegeliano, para lo mismo; precisamente hay que recordar las alabanzas que hacía del marxismo, nadie más ni nadie menos, que Joseph Goebbels, ministro de propaganda del Tercer Reich entre 1933 y 1945, quien, decía: “ El movimiento nacional-socialista tiene un solo maestro: el marxismo” a lo que hay que agregar la frase de Adolfo Hitler: “He aprendido mucho del marxismo, no dudo en admitirlo”.
Así las cosas, Gustavo Petro que jamás renegó del marxismo, por lo menos debería enterarse mejor acerca de la historia y la concepción de las doctrinas totalitarias fascista, nazista y comunista, antes de hacerle señalamientos a sus contradictores; porque lo que hemos visto en varios escritos, foros y entrevistas, es que la senadora María Fernanda Cabal, maneja muy bien el tema; entonces hay que decirlo sin temor a equivocarnos, que si se presenta un debate sobre el fascismo y el marxismo, como se diría coloquialmente La Cabal volvería ropa de trabajo a Petro, poniéndolo en ridículo.
Porque el senador de la Colombia Humana quiere desconocer que en el marxismo se originó el fascismo; volviendo a recordar que Benito Mussolini su fundador fue a principios del siglo XX dirigente del partido socialista italiano, marxista recalcitrante, camarada de sátrapa ruso Lenin del que fue muy cercano y además el Duce fundó el fascismo para hacer más rápido la revolución en la península itálica, como lo admitió Lenin en una visita que miembros del partido comunista italiano le hicieron en Moscú en 1922, de manera que cuando la senadora Cabal en diferentes entrevistas relaciona al fascismo con el socialismo está en lo cierto, y solo los ignorantes que desconocen la historia la tergiversan y la caricaturizan.
Para completar las cercanías entre el marxismo y el fascismo, no se puede desconocer a Nicola Bombacci (1879-1945), fundador del partido comunista italiano, quien acompañó a Mussolini en su empresa fascista y murió ejecutado junto al Duce en 1945, y cuando iba a ser fusilado Bombacci, gritó: ¡Que viva Mussolini! ¡Que viva el socialismo!” con lo que se demuestra la intima relación entre comunismo y fascismo, así los seguidores del engendro marxista evadan ese debate con sus conocidos discurso miserabilista, engañando a las masas prometiéndoles que serán los nuevos mesías, pero lo cierto es que está demostrado que los seguidores de la secta marxista(con todas sus denominaciones) que es genocida y burocrática, al igual que Hitler en Alemania y Mussolini en Italia antes de tomar el poder político, prometen la emancipación de los pobres, pero simplemente como una patraña para alcanzar sus tétricos fines.
Petro que ya tiene décadas abrazando los dogmas marxistas todavía no se ha enterado de que hace cerca de 150 años, los sofismas de Karl Marx fueron repudiados en la Primera Internacional de los trabajadores, por considerar que el Estado era un “látigo sagrado” en contra de los obreros que duraría prácticamente por toda la eternidad para después llegar al “paraíso”, semejante aberración fue desenmascarada por los libertarios Bakunin y Proudhom; de modo que hay que estar de acuerdo con los que afirman que el hecho de que todavía exista una doctrina supersticiosa y criminal como el comunismo, es una de las peores vergüenzas que ha tenido la humanidad en todos los tiempos.
En atención a lo cual para disipar anfibologías es menester que en el debate electoral, se superen las narrativas y las falsas promesas que se le hacen a la ciudadanía, y que de una vez se conozca quienes son los enemigos de la democracia, para que no se mimeticen más, aprovechándose del atraso conceptual e ideológico de algunos sectores de la población; dado que hay que ir a la esencia, buscando la trascendencia y no quedarnos en la superficialidad que es la que actúa en el quehacer político colombiano.
Esperamos ansiosamente un debate político, ideológico y filosófico entre la senadora Cabal y Gustavo Petro sobre el marxismo y el fascismo que le han hecho un gran daño a la humanidad, pero el primero tiene el campeonato mundial, siendo Colombia una de sus principales víctimas, debido a que el comunismo es responsable de la violencia política de las últimas 7 décadas al tener como fundamentos el odio y la lucha de clases, buscando la toma del poder y de ese modo mancillar y envilecer al pueblo. Los grandes medios de comunicación tienen la palabra para que se pueda dar un debate de esas características, lo que sería algo novedoso.
