El cine occidental ha inspirado los videos del Estado Islámico (EI), dirigidos principalmente a jóvenes extranjeros pues los registros audiovisuales no los produce un árabe o musulmán. Detrás de la maquinaria de guerra de la organización terrorista más poderosa del mundo está Deso Dogg, rapero alemán encargado de crear los productos audiovisuales.
Denis Mamadou Gerhard Cuspert, alias Deso Dogg, nació en Kreuzberg, uno de los barrios más peligrosos de Berlín en los años 80. Antes de que se derrumbara el muro de Berlín, en plena guerra fría, este era el lugar predilecto para las reuniones y el expendio de droga. Junto a su padre, ganhes y su madre alemana, convivían en medio del caos, pero su padre no aguantó y los abandonó. Para solventar la situación la madre se consiguió un esposo militar de los Estados Unidos.
Cuspert decidió salir a las calles. La influencia y la llegada de inmigrantes al barrio le permitieron conocer las diferentes culturas del mundo. A temprana edad desvalijaba a los turistas y parte del dinero la destinaba al hogar. Más tarde se unió a las pandillas, pasó largo tiempo en centros penitenciarios infantiles y ya adulto fue condenado por tráfico de drogas. Al salir de la cárcel, rapeaba y se convirtió en una estrella del rap gangster. En el 2005 renunció a una gira en el país con DMX, rapero y actor de los Estados Unidos, grabó videos musicales y apareció en televisión. Infortunadamente su inestabilidad emocional lo llevó varias veces a prisión.
De a poco se dio a conocer, fue icono popular de la juventud alemana, pero luego de sufrir un accidente de tránsito en el 2010, el islam “le dio sentido a su vida”. “Yo era un pecador. Vivía en el pecado antes de conocer el islam. Me rodeaban la música, las drogas, el alcohol y las mujeres”, señaló en ese momento.
El rapero cambió su nombre a Abu Talha the German. Compuso algunas canciones en las que apoyaba a los islamistas que luchaban en Medio Oriente y África. En el 2011 fue judicializado por porte ilegal de armas; se le incautó una pistola con munición. La transformación comenzó a notarse, las autoridades alemanas prendieron las alarmas sobre su influencia y de hecho, en el aeropuerto de Frankfurt ese mismo año, un yihadista, Arid Uka, asesinó a dos norteamericanos. El ataque yihadista es el único hasta el momento en Alemania. Arid Uka aseguró a la policía que vio un video de Deso Dogg lo había inspirado.
También formó un grupo salafista (movimiento sunita musulmán) y comenzó a dar discursos radicales que colgaba en la red. En el 2012 participó de enfrentamientos entre salafistas y miembros de extrema derecha en Alemania. Por la presión de la policía se instaló en Turquía, luego Egipto y advirtió de una yihad en Alemania. En el 2013 se trasladó a Siria y combatió junto a las fuerzas opositoras que enfrentaban el régimen de Bashar Al-Assad.
Ese mismo año, herido en un enfrentamiento, abandonó el campo de batalla. Abu Talha asumió las riendas de la productora Al Hayat Media Center. Conocedor del lenguaje audiovisual norteamericano y de las experiencias en videoclips, pasó a ser el encargado de dirigir y producir la propaganda audiovisual del Estado Islámico.
Los videos, que duran entre 3 y 6 minutos, registran la motivación de los combatientes para creer en la causa islámica. En cuantiosos casos un entrevistado describe la experiencia en el EI y se muestra en el campo de batalla o, también se da la opción de aparecer desde cualquier monte de Irak o Siria explicando la supremacía de la organización. Lo que las noticias muestran son las ejecuciones, por supuesto.
El material es traducido al inglés, francés y alemán. La calidad de imagen es impecable, graban a dos cámaras; el sonido es perfecto y usan el recurso de la profundidad de campo para darle un toque cinematográfico. La fotografía es pulcra y, junto a una edición minimalista, enganchan a los futuros yihadistas del mundo o infunden el terror en occidente.
El Estado Islámico es innovador en el uso de la internet. La llegada de combatientes extranjeros que en su mayoría de casos son estudiantes profesionales, incentivó la inversión en tecnología de punta. Los videos de alta definición son más atractivos para el público joven que visita las redes sociales. Las producciones audiovisuales semiprofesionales calaron en el público on-line con gran eficacia. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos el EI recluta 200 jóvenes al día, un total de 6000 mil combatientes en el último año, de los cuales 1300 son extranjeros.
Entre tanto, se corrió el rumor de la muerte del rapero en un bombardeo en Siria en el 2013, aunque en un video reciente de noviembre del 2014 apareció el rapero sosteniendo una cabeza de un hombre y alegando de la promesa de la yihad en Alemania.
@JuanCachastan
