La verdad, desde que Gustavo Petro asumió la alcaldía de mi ciudad nunca he estado de acuerdo con la mayoría de sus decisiones, bueno en realidad solo he estado de acuerdo con dos. Le prohibición de las corridas de toros y la eliminación de los vehículos de tracción animal. Como senador de la república y político fue excelente, logro destapar la parapolítica y la FARC-política, las “chuzadas” del ya desaparecido DAS, y cuestiono la responsabilidad del Sr. Uribe Vélez en la creación de las llamadas CONVIVIR.
Des afortunadamente ese ingenio político que lo hizo tan visible en el congreso, no lo logró llevar a la administración de la ciudad capitalina. Su mal asesoramiento para administrar los recursos e ideas que lo hicieron resultar electo como alcalde, es lo que lo tiene hoy ad portas de una muerte política.
En estas líneas no pienso cuestionar las decisiones del ratificado exalcalde, pues no soy quien para hacerlo. Escribo estas líneas para expresar de lo que muchos Bogotanos y sobretodo Colombianos estamos siendo testigos. El abuso de poder por parte del que muy seguramente puede ser en un futuro el presidente de nuestra amada república. Me refiero al señor procurador Alejandro Ordoñez. Amigos lectores, estamos frente a un candidato presidencial de ultra derecha, ultra católico y que a mi juicio puede llegar a ser mucho más peligroso que el mismo sr. Uribe Vélez. El procurador Ordoñez no solo ha tenido la osadía de por de bajear a la comunidad LGBT, cuestionar el aborto, el matrimonio entre parejas del mismo sexo, si no que ahora también tiene la osadía de pasar por encima, pisotear y derrocar la decisión electoral del 32,22% de ciudadanos que creyeron en Gustavo Petro. El procurador se adelantó de una manera vil y descarada a una decisión que estaba en marcha y que solo los bogotanos podíamos tomar en las urnas. La revocatoria del exalcalde solo nos correspondía a nosotros los ciudadanos de la capital.
Pero la destitución no fue suficiente para el procurador, muy en el fondo sabía que Gustavo Petro podía ser un enemigo electoral en potencia y que muy seguramente lograría ganarle en los comicios presidenciales de 2018 o 2024, así que tomo la nuevamente atrevida decisión de inhabilitarlo por 15 años de cualquier ejercicio político. Además de esto los amigos del procurador Ordoñez, quien recordemos, fue presidente de la Corte Constitucional, ratificaron la decisión de destitución impuesta por este.
A todas luces, esta fue una estrategia para sacar al primero de sus futuros obstáculos hacia la carrera por la casa de Nariño. Colombia, des afortunadamente es un país sin memoria y en algunos años veremos a un dictador de verdad, gobernando nuestro ya desgastado país. Las decisiones del pueblo en unos años, no serán tenidas en cuenta y estaremos sometidos a un régimen ultra derechista. Hay un personaje en la película “V for Vendetta”, el canciller Suttler, este personaje es la misma imagen de lo que será el procurador Ordoñez en unos años.
Quienes no han tenido la oportunidad de ver la película se las recomiendo. Verán al procurador con otra cara pero la misma esencia.
