Jean Claude Bessudo aprendió la disciplina que rige su vida de Elizabeth Magenthies, la niñera alemana que tenía en su casa, en Francia, cuando era apenas un niño de cuatro años. Tati, como le decían a Elizabeth, los obligaba a él y a sus hermanas a terminarse toda la comida antes de levantarse de la mesa, a arreglar sus habitaciones y a hacer las tareas antes de poder jugar.
Le puede interesar: Moteles y restaurantes los negocios de Lucho Herrera tras su retiro del ciclismo
Con su niñera convivió hasta los ocho años. Tras la muerte de su padre, en un viaje de negocios en Argentina, todo cambió para los Bessudo. Su mamá se trasladó de Niza —donde él nació— a París, con su nuevo esposo y los hermanos Bessudo fueron a parar a un internado, donde la vida de lujos, libertades y comodidades desapareció.
A los doce años, en 1.959, aburrido de la vida en el internado, Jean Claude viaja a Colombia a vivir con su tío paterno Víctor Bessudo, el empresario francés que dos años atrás, junto a Jorge Moncada y Jorge Madero, con 60 mil pesos y cinco empleados, había fundado la agencia de viajes Aviatur.
Con un mínimo de español, y estando a cargo de sus tíos, Jean Claude Bessudo entró al Liceo francés a terminar el bachillerato; fue el único grado académico que alcanzó en su vida. Aunque era un excelente estudiante y un habilidoso para las matemáticas y para el dibujo y para el análisis, no logró terminar ninguna carrera profesional. Estudió seis semestres de ingeniería civil en Los Andes, también estudió en Europa, pero allí tampoco se graduó.
Luego de haberse graduado como bachiller en Bogotá, saltó a Estados Unidos, donde trabajó como mesero de un restaurante francés, de donde recuerda, en una entrevista para El Tiempo, haber ganado bastante dinero, con lo que viajó a Bélgica a donde llegó a estudiar matemáticas y donde trabajó como modelo de desnudos para una clase de escultura en la Academia Real de Bellas Artes de Bruselas; por aquellos años conoció a su esposa, con quien se casó a los 19 años y con quien lleva 55 años, aunque sus amigos, exnovias y familiares no le auguraban a su matrimonio más de cuatro meses. Con la artista belga Danielle Lion el empresario tuvo tres hijos: Ann, Sandra y Samy.
Su llegada a Aviatur, la empresa de su tío, llega después de su matrimonio, a finales del año 67. Su tío Víctor, fundador de la compañía, había fallecido un par de años atrás y la esposa de él le dijo a Jean Claude Bessudo que la acompañara como su asistente, mientras que Danielle trabajaba como profesora de Francés; en poco tiempo el joven Bessudo empezó a manejar la compañía, la cual lleva presidiendo más de 50 años y convirtió en el fortín familiar y en la empresa líder de las vacaciones y el divertimiento de los colombianos. Bessudo y su esposa son dueños del 33%, su primo Leonel Bessudo tiene el otro 33% y Sonia Gutt de Haime del grupo Grasco tiene el restante 33%. Las 35 empresas que han creado alrededor de Aviatur tienen el mismo porcentaje y los mismos dueños.
Uno de los secretos de Jean Claaude Bessudo para en 2007 ser elegido como el mejor empresario de Colombia, según él mismo lo ha dicho, es no tener nada que hacer. Para el colombo-francés de 74 años, que ha sido criticado por el control que le han dado los gobiernos para la explotación turística de zonas como el Parque Tayrona en Santa Marta y que ha sido relacionado con grupos paramilitares, de lo que salió exonerado luego de investigaciones judiciales, la regla de un buen empresario y de una buena empresa es no dejar nada pendiente, ni tan solo una llamada, ni un solo documento sin firmar, ni una sola petición por atender. El orden estricto y acabar con todas las tareas lo aplica para su vida personal, familiar y laboral y eso lo aprendió a los cuatro años de la mano de la niñera alemana que disciplinó con una formación casi que militar.
