El pasado 9 de abril se llevo a cabo el día de la memoria, precisamente para conmemorar y recordar las víctimas de la violencia en Colombia, por nuestra parte pudimos asistir a un evento muy importante organizado por la Universidad Francisco de Paula Santander y su Facultad de Derecho, nada más ni nada menos que la inauguración del primer parque y jardín de la memoria en Colombia, ubicado en la vereda las Liscas de este municipio, sitio donde fueron hallados los cuerpos de los denominados falsos positivos (ejecuciones extrajudiciales) cometidos por agentes del estado (ejército Nacional) y del cual existe un documental muy interesante llamado “retratos de familia” de Alexandra Cardona, quien hizo presencia con las madres de Soacha, definitivamente un triste recuerdo para el país, en unos años de “oscuridad Democrática” liderados por Uribe y Santos y que enlodaron el buen nombre de esta ciudad, y donde recientemente le votaron 5000 almas para Senado, bastante contradictorio.
De este día se desprenden conclusiones como, que siguen 3 cuerpos sin identificar de 17 hallados y entregados a sus familiares, siguen las amenazas a las madres de Soacha algunas tienen que cambiar frecuentemente de domicilio debido al acoso de mensajes intimidantes, en Ocaña también hay madres victimas de falsos positivos, así lo dieron a conocer en un conversatorio, y solicitaron el apoyo de Alexandra para poder iniciar las respectivas investigaciones, dando nacimiento a la “asociación de madres de Ocaña” y quienes esperan el reconocimiento del estado.
Otras conclusiones tienen que ver con la precaria Justicia, pues la dilatación de los Abogados de la defensa de los militares hace imposible el accionar del aparato Judicial, en palabras expreso una de las madres, “ a un abogado se le ha muerto la madre hasta 3 veces” y tienen que suspender las audiencias, Uribe en sus época de antes de la reelección las invito a Palacio con el ánimo de “utilizarlas para la reelección” pero prefirieron no caer en esa tentación.
Afortunadamente el proceso de ayuda por parte de la Universidad de Ocaña con este tipo de actividades demuestra que en el país por encima de la violencia existe un corazón noble y reconciliador, las madres de Soacha solo esperan el que se conozca la verdad, y que inteligentemente aprendamos que las divergencias no hacen camino, solo el perdón. Es importante este tipo de actos para reconocer la memoria de quienes han sido víctimas de estos hechos, y continuar limpiando la imagen de la tierra prospera de Colombia, Ocaña sin duda seguirá apoyando los procesos de reconciliación sobre todo en una región que tiene ganas de seguir adelante y que se llama Catatumbo, felicitaciones a la UFPSO por tan noble conmemoración que nos permitió recordar que todos somos hijos de una misma patria y que merecemos vivir.