¡Un momento, por favor! Permítanme explicarles, no me las estoy picando, porque yo también estoy estrenando la palabrita aquella que usé en este titular.
Por el impacto visual y emocional, y por la carga simbólica que tiene la nueva bandera de Popayán que reinstaló el alcalde Juan Carlos López Castrillón a la entrada norte de la capital del Cauca deduce uno que es un importante esfuerzo institucional por recuperar una identidad colectiva; además de una forma sencilla pero eficaz de invitar a repensar nuestra actitud cívica y de convocar la voluntad popular para que con inspiración patriótica sigamos trabajando unidos por nuestra ciudad, llevando nuestro orgullo, pasión y amabilidad de payaneses a todos los rincones de la nación y el mundo.
Esa es la impresión que uno se lleva al ingresar a la ciudad y encontrarse con la gran bandera bien desplegada, ondulando al filo del viento, como si nos estuviera sonriendo, y recordando su significado: "La gloria de los altos hechos y de los nobles ideales, decoradas por la cruz del sacrificio".
Esa significación fue la que le dieron a la bandera de Popayán los conocedores de la ciencia heráldica, porque para ellos el color amarillo (gualdo) es símbolo de gloria; el azul oscuro (azur), emblema de ideales; y el rojo, expresión de sacrificio. Aunque también se le adjudican otros alcances a esos colores:
- Amarillo: símbolo de generosidad.
- Azul: símbolo de verdad y lealtad, perseverancia y justicia.
- Rojo: símbolo de resistencia, valentía, fuerza y valor.
Ah, para los que no saben, la heráldica es el "estudio de los escudos de armas o blasones". En el pasado, el estudio de las banderas también se consideraba parte de esta ciencia; pero fíjense que investigando un poco sobre estos asuntos, gracias al motivo que me dio el alcalde de Popayán, descubrí que el estudio de las banderas es abordado por la vexilología, una herramienta auxiliar tanto de la historia como de la semiótica, en cuanto a su uso como signo y símbolo.
Ah, ¿se dan cuenta de que no quería picármelas con el titular de esta nota? Estoy aprendiendo.
Resuelta la curiosidad idiomática, y el mensaje de libertad, democracia y justicia que retomó López Castrillón con la tremolante bandera, es oportuno resaltar que en Popayán también se está celebrando el XVIII Congreso Gastronómico.
El evento formuló una programación virtual y una muestra presencial que permitirá a los colombianos y seguidores de otras partes del mundo disfrutar de la denominada Tarima del Saber, Tarima del Sabor y una feria gastronómica con productos locales. Además, la realización de diálogos académicos y talleres sobre los saberes de distintas disciplinas y regiones del país, así como degustaciones.
Y durante el foro La gastronomía y la industria naranja, a nivel territorial y local, que se llevó a cabo recientemente, Juan Carlos López, en conversación con Enrique González Ayerbe (presidente de la Corporación Gastronómica de Popayán), hizo importantes anuncios.
Pronto presentará doce nuevas rutas turísticas de Popayán, que tienen como fin mostrar la riqueza natural, gastronómica y patrimonial de la región. Haciendas, avistamiento de aves, y muchos más lugares llenos de experiencia que es necesario potencializarlos. Además dijo López Castrillón: "Necesitamos que se visibilicen los productos que reflejen la identidad del Municipio. Sin duda alguna, la Corporación ha jugado un papel fundamental durante este proceso y ahora como Alcaldía vamos apostarle al fortalecimiento en materia de gastronomía, emprendimiento y turismo".
Saliendo nuevamente hacia el norte, de nuevo la bandera. Todo un gran símbolo que, jugando con el aire, nos recuerda y nos lleva a promover la paz, la compasión, la bondad, la fuerza y la sabiduría. Gracias, alcalde.