El 15 de octubre de 2023, en el marco de unas elecciones atípicas para el Ecuador, Daniel Noboa, el heredero de un emporio bananero, logró convertirse en Presidente de la República a sus cortos 36 años y con una corta experiencia política que solo incluía dos años como Asambleísta.
Las elecciones fueron atípicas porque se convocaron de forma extraordinaria después de que el anterior presidente, Guillermo Lasso, decretara la “muerte cruzada” y disolviera el Parlamento buscando evitar un juicio político. Además, uno de los candidatos que estaba en la contienda, Fernando Villavicencio, fue asesinado el 9 de agosto de 2023 tras haber denunciado amenazas en su contra por parte de bandas ligadas al narcotráfico.
Contra todo pronóstico, tras una campaña en la que tenía que utilizar chaleco antibalas durante sus apariciones públicas y apoyado por el movimiento Acción Democrática Nacional, Noboa logró imponerse en segunda vuelta con un 51,83 % de los votos a Lucía González, la candidata de Revolución Ciudadana, movimiento liderado por el expresidente Rafael Correa.
El empresario se posesionó el 23 de noviembre de 2023 en un evento que tuvo como único jefe de Estado presente al presidente de Colombia, Gustavo Petro. Hoy, solo mes y medio después de llegar al poder, amaneció declarando que Ecuador se encuentra inmerso en un “conflicto armado interno”.
Los orígenes de Daniel Noboa
En 1994 falleció Luis Adolfo Noboa Naranjo siendo el hombre más rico de Ecuador gracias al emporio bananero que había construido y gracias al cual es considerado por muchos como el empresario más importante del país en el siglo XX. En ese momento, Bonita, la empresa familiar, controlaba el 40 % de las exportaciones de banano de Ecuador, que alcanzaban USD 800 millones y sus empresas representaban un 5% del Producto Interno Bruto de Ecuador.
Él era el abuelo del actual Presidente de la República y de allí se explica su fortuna.
De igual manera, el hijo de Luis y el padre de Daniel, Álvaro Noboa, intentó hasta cinco veces llegar a la Presidencia utilizando el poder político y económico del fundador de la dinastía, pero, no lo consiguió. Cuando estuvo más cerca fue en 2006, elecciones en las que logró avanzar a segunda vuelta y terminó siendo derrotado justamente por Rafael Correa.
El encargado de romper ese techo de cristal fue el representante de la tercera generación de la familia, Daniel Noboa, quien llegó presentándose como un político de centroizquierda y asegurando que iba a tener mano dura contra la delincuencia y especialmente contra los carteles del narcotráfico. Justamente, esta lucha fue la que desencadenó la papa caliente que le explotó para comenzar el año.
En poco más de mes y medio en el poder ha visto como se desata el desorden en hasta seis cárceles del país, llegando hasta el punto de que se fuguen líderes de varias de las bandas criminales más importantes, incluyendo a Adolfo Macías, alias "Fito" y a Fabricio Colón Pico, alias “El Salvaje”.
Esta circunstancia le obligó al inexperimentado político a decretar un “estado de excepción”, tras la cual se han presentado hechos insólitos como que hombres armados irrumpan en el canal de televisión TC de Guayaquil tomando rehenes en medio de una transmisión en directo o como que estos mismos grupos realicen incursiones en universidades y otras instituciones públicas de Ecuador.
Lo cierto es que, desde el 23 de noviembre, Daniel Noboa apenas ha tenido tiempo para comenzar a aplicar su programa de gobierno, el cual se centra bastante en temas económicos. No obstante, expertos aseguran que la ola de violencia puede ser una reacción ante el otro gran tema de su agenda, la seguridad y particularmente a la forma en la que quiere reformar el funcionamiento de las cárceles. Es una difícil situación con la que tendrá que lidiar durante los 16 meses que le quedan en el poder.
También le puede interesar: Los empresarios colombianos en Ecuador que seguirán con sus negocios en el gobierno de Daniel Noboa