Los números de Daniel Felipe Martínez en lo que va del año no dejan ninguna duda. Es el mejor corredor del año. En la mítica carrera de Lieja-Bastoña-Lieja, una de las carreras de un día más importantes del calendario ciclística mundial, competencias en donde, además de la victoria en el 2016 de Esteban Chaves en el Giro de Lombardía, Colombia no ha tenido mayor figuración. Martínez tuvo un problema mecánico justo en el momento en el que Evenopoel atacó a 25 kilómetros de meta para llevarse el Monumento. Si hubiera estado en igualdad de condiciones hubiera ganado, tenía las piernas y la fuerza. Sin embargo le alcanzó para ocupar la cuarta casilla de la competencia.
En lo que va del año Martínez ganó la Vuelta a Cataluña, fue tercero en la París Niza y estuvo en el Top 5 de dos monumentos. Siendo gregario de Egan Bernal, Martínez alcanzó a ser quinto en el Giro de Italia. Seguramente, si hubiera tenido la libertad de sus jefes ingleses, se hubiera quedado con el Rosa. Ahora, con 25 años, estaría listo para alzarse con la gloria eterna. Pero es trabajador del INEOS y el capital con el que se mueve este equipo es inglés. Por eso debe obedecer órdenes y estas son apoyar al crédito de Inglaterra, Adan Yates quien, por nivel, no le da ni por los tobillos a Martínez.
Si tuviera apoyo estatal el Dany tendría un equipo que lo encumbraría a las cuestas del ciclismo mundial. Lo mismo le pasaría a Miguel Ángel López quien tenía todo para ser podio en la Vuelta a España 2021 pero sus jefes del Movistar le dieron la orden de parar para favorecer al español Enric Mas. Ese mismo equipo pasmó a Nairo y le impidió seguir creciendo. Si tuviéramos la posibilidad de tener un equipo nacional nuestros ciclistas brillarían aún más en Europa.