Son muy conocidos por todos los problemas que actualmente tienen varias regiones del país, desde problemas causados por efectos ambientales, hasta otros desencadenados por violencia y corrupción.
La lista es larga, podemos mencionar la falta de agua en Yopal, la crisis absoluta de todo índole en La Guajira, la sequía en varios departamentos de la Costa Caribe, la crisis de violencia que afecta Quibdó, Cali y Buenaventura, inundaciones en Caquetá y hasta los trancones de Bogotá, solo por mencionar algunos. Pero a la hora de buscar culpables de estas situaciones, como siempre parece ser que nadie tiene la culpa.
Culpables hay de eso no existe duda, tanto los gobiernos regionales como el nacional comparten la responsabilidad. Pero este es un país de políticos hábiles, donde el gobierno nacional optó por la estrategia de culpar siempre a los gobiernos regionales de los problemas. De esta forma el gobierno nacional culpa a alcaldes y gobernadores de todo el país de los problemas, aun cuando en un país centralista como el nuestro, en muchas oportunidades los mandatarios regionales no cuentan con suficientes recursos o poder para enfrentar muchas situaciones.
Esta actitud mezquina e indiferente del gobierno nacional nos hace pensar que la Colombia que ellos gobiernan no está acá, ya que parece ser que ninguna región hace parte del país que ellos gobiernan. Hay que recordarle al gobierno nacional que antes de bogotanos, guajiros, caleños, llaneros, etc, todos somos colombianos y que sea cual sea el problema, el máximo dirigente del país es el presidente y este tiene responsabilidad tanto por dejar a Yopal 3 años sin agua, a Cartagena con 4 años de retraso en transcaribe y hasta por el estado lamentable de la AV. Caracas en Bogotá.