Junner Fabián ha hecho parte de la Fundación Tierra Viva desde que era niño. Ha visto cambiar el paisaje y ha defendido la tierra de Belén de los Andaquíes aunque esto le haya costado tener tropiezos con la comunidad, con las organizaciones territoriales o con los actores del conflicto armado. Asegura que se trata de una zona estratégica para muchos, desde frentes del ejército hasta comercializadores de madera y ganaderos y que, el trabajo de estos 20 años ha consistido en convencerlos a todos ellos de que cuidar esta tierra es cuidarse a sí mismos.
- Y en esos 20 años, ¿cuál ves que sea el mayor logro de la Fundación?
- Yo creo que un gran logro ha sido poder contribuir con ese pequeño grano de arena a la creación de 9 Parques Naturales en el municipio, a la protección de muchas de las especies que se encuentran en esta región, en este sector y el poder trabajar con la comunidad y para la comunidad.
- ¿Qué es lo que más le ha gustado?
- Lo más chévere del proceso es que hemos estado todos. Porque es que la fundación no solamente son los socios. También son muchas personas que indirectamente siempre nos han ofrecido un apoyo y la mano para llevar a cabo el proceso. Además de cada uno de los miembros de las familias que participamos. Ha sido más el cariño por querer el territorio lo que nos ha motivado a hacer el ejercicio. Porque cada uno que está en la organización y los que nos apoyan desde afuera, ha sido siempre de forma voluntaria nunca ha habido remuneración. No. Es todo por querer hacer algo por el municipio entonces siempre hay recursos por lo que cada uno aporta.