En la Galería El Museo en Bogotá se presentan varias exposiciones interesantes. Por ejemplo, el barranquillero (1976) Marco Mojica irónicamente, presenta su serie Cocktail Clothes donde realiza una conjunción de valores en la que el arte y la frivolidad de un vestido para cóctel —para alguna inauguración de galería— tiene más sentido de su preocupación social y hacen parte de su contenido. Nada es tan grave. Son los ricos lo que compran arte. Y ellos pueden pensar en las dos cosas.
Marco Mojica, de la serie Cocktail Clothes, Rocky Bleeding Beuys
En dibujos en tinta sobre papel elabora vestidos convencionales donde sus estampados los realiza con imágenes icónicas de artistas de Andy Warhol, Damien Hirst Steven o Joseph Beuys. En el caso de este último, en una de sus presentaciones fue agredido por un espectador. Así, Mojica asimila la agresión con una pelea de boxeo con Rocky Balboa. Para su lectura contemporánea y heterodoxa, es la apropiación de diversas fuentes como el internet, revistas de modas, películas o revistas de arte. Todo cabe en una propuesta que trata de asimilar una serie en sus imágenes que convergen en lecturas simultáneas dónde se unen las circunstancias sociales con el mundo del arte.
Manuel Calderón piensa en una serie sobre la geometría repetitiva como expresión armónica. En la exposición resultan ser demasiados y, además aburridos.
Manuel Calderón, La caja vacía
Pero cuando se entra en la perspectiva de unas pequeñas cajas de luz, la observación del objeto urbano, la dimensión de la luz, la geometría como argumento y la perspectiva como propósito, hace más interesante su argumento objetual.
Como el artista anota en su texto “El punto de partida de una reflexión alrededor de la cultura ocular centrista de Occidente y como el artista ha estado relacionado tanto con la ciencia como con el pensamiento en distintos periodos históricos para influir en su curso. La claustrofóbica y contemporánea sensación de habitar una caja sin salida, da lugar para observar con detenimiento las imágenes que se proyectan y dan forma a la misma caja, y así, comprender la compleja estructura que hay alrededor para luego desdibujarla”.
Un dibujo figurativo de Calderón, que se encuentra asilado al comienzo de la exposición parece un equívoco. Pero es un acierto. Nos muestra otra sensibilidad del artista.
Jorge Cabieses, de la serie Liberaciones Simbólicas
Jorge Cabieses, un peruano que nació en 1971, es otro geométrico que interviene en soportes diferentes. Interesantes los moldes para producir el pan en aluminio. Enncaja, de manera particular en una geomatría que congrega su repetición porque dentro del material industrial, logra una trama de un objeto.
En la serie Decapitados nos muestra su interés en un salto entre culturas donde reproducciones de Gobelinos del siglo XIX son el soporte de su intervención severa a una geometría de colores agresivos que irrumpe la razón histórica y nos deja en el limbo de lo contemporáneo. Lo mismo sucede cuando utiliza láminas de una revista del siglo XIX español donde imágenes bucólicas son intervenidas en primer plano, por una geometría severa del siglo XX.
Cynthia López, Eva
Cynthia López repite un surrealismo ancestral. Nada interesante. Demasiado Barroco para una actualidad limpia de lastres y demasiado Surrealista cuando ya se han cumplido las leyes del inconsciente colectivo.