¿Cuántos políticos y periodistas colombianos se podrían identificar con los personajes de House of Cards?

¿Cuántos políticos y periodistas colombianos se podrían identificar con los personajes de House of Cards?

Apenas va por su segunda temporada y ya es la serie más vista por internet. Los entuertos, codicias y traiciones de esta historia no están muy lejos de la corruptela política de Colombia.

Por:
abril 08, 2014
¿Cuántos políticos y periodistas colombianos se podrían identificar con los personajes de House of Cards?

Cae la noche sobre Washington y lo único que se ve en sus calles es el infatigable trasegar de los vehículos por las autopistas. Al lado del Potomac, un desecho tóxico se va fundiendo con el pasto. No se ve ningún ser vivo caminando por allí, sólo las luces encendidas y el Capitolio que con la tranquilidad de un gigante, observa desde una lomita cómo la ciudad se rige desde su sombra.

Desde los créditos iniciales queda claro que la capital de los Estados Unidos será protagonista de primer orden en toda la telaraña de intrigas, estrategias y complots que rodea a los personajes de House of cards. Como si se tratara de una corte medieval ahí va, sin su caballo, este Ricardo III post-moderno. Francis Underwood (Kevin Spacey) concentra todos los vicios, virtudes, defectos y mañas que puede tener un político para estar allí,  en el lugar en donde se cuece el poder,  donde hay que tener la suficiente habilidad para degollar al cordero sin que este vea el cuchillo. Hazte amigos de todos y traiciónalos, nunca dudes en que el único pellejo que se debe salvar es el tuyo.

En House of cards, como en la  vida real, los que tienen buenas intenciones casi siempre pierden. Garret Walker, el presidente de Estados Unidos, quiere apostarle al futuro y es por eso que en su administración los principales protagonistas serán los niños. Para ello ha decidido presentar una reforma educativa realmente revolucionaria que no tardará mucho en ser boicoteada por Underwood y sus perros de presa.

En esta dura crítica al sistema político norteamericano, vemos como el presidente es sólo una figura decorativa, algo tan inútil, e ingenua como lo puede ser un Rey en pleno Siglo XXI. Es en el Congreso en donde reside la autoridad, el control y el poder. Es allí donde se lanzan no sólo los proyectos de ley que regirán la vida de los ciudadanos, sino también  desde ese lugar se dicta quién asciende, quién baja, quién vive y quién muere.

house of card editada - ¿Cuántos políticos y periodistas colombianos se podrían identificar con los personajes de House of Cards?

Si quieres entender cómo funciona la política, deja de ver noticieros y leer esos amarillentos libros de Norberto Bobio, la verdad está acá en esta serie de Netflix impecablemente dirigida, magistralmente escrita y maravillosamente actuada que el pasado mes de febrero estrenó su segunda temporada y en donde aparecen un par de referencias de Colombia que acá me negaré a espoliar.

En esta historia,  despreciada por las grandes cadenas de televisión debido a lo iconoclasta de su planteamiento, queda claro cómo se crean las maquinarias, cómo se maneja la información y cómo se establecen las alianzas entre congresistas y periodistas. Reuniones que casi siempre terminan entre las sábanas de una cama desordenada.

Lo que se cuenta en House of Cards va más allá del ámbito norteamericano  y, en su clara universalidad, uno no puede dejar de hacer paralelos con la política local. Frank podría ser José Obdulio Gaviria en la época en que se movía con plena libertad por los pasillos del Palacio; intrigando, calumniando y señalando al que se negara aceptar un siglo de uribismo. En la figura de Peter Russo, un sindicalista aguerrido que ganó un escaño en el Senado gracias a su férreo temperamento, pero que, debido a sus debilidades y a su innata ambición, termina vendiéndole el alma al Diablo y decide traicionar al pueblo que lo eligió, podríamos identificar a Angelino Garzón.  Y en Zoe Barnes, la inescrupulosa periodista que no duda un segundo en hacer cualquier cosa con tal de encontrar la chiva que le garantice la primera plana de la edición del periódico del domingo, pude recordar lo que hace unos años hacían las presentadoras de noticias (casi escribo periodistas) de RCN cuando, sin ningún tipo de pudor, demostraban delante de la cámara su fanatismo hacia el patrón del Ubérrimo. El periodista, convertido en un instrumento de control y manipulación en manos del dirigente de turno, puede llegar a ser un arma terrible. Michael Kern, el nuevo Secretario de Estado, fue en la universidad un radical que consideraba ilegal la ocupación israelita en Palestina y tenía ideas bastante extremas para acabar con la derecha en el mundo. En su sometimiento absoluto al sistema podríamos identificar a Everth Bustamante, exguerrillero del M-19 quien hace poco se convirtió en nuevo senador uribista.

Y bueno, la labor de investigación de los guionistas de la serie fue tan buena que es inevitable que se parezca a la vida real. La mermelada también acá hace su aparición. El asunto es que una vez se está arriba, uno debe retribuir a la gente que lo ha ayudado en el ascenso y si se quiere seguir subiendo, para ir sobre seguro es mejor no dejar de repartir. De Frank Underwood podrán decir lo que quieran pero él es un hombre que sabe pagar favores. Así que allá también tienen la costumbre de repartir ofrendas a diestra y siniestra. Si la quieres recibir, serás mi amigo, si escupes sobre ella recibirás el descredito, la anulación social y hasta la muerte. Sí, son tan hábiles que ninguna de sus víctimas ha visto el cuchillo.

El sindicalista Peter Russo podría ser nuestro Angelino Garzón - ¿Cuántos políticos y periodistas colombianos se podrían identificar con los personajes de House of Cards?

El sindicalista Peter Russo podría ser nuestro Angelino Garzón

Sería bueno preguntarles a nuestros políticos si siguen la serie de Netflix. Lo más seguro es que responderán que no. Están demasiado ocupados arreglando los problemas del país como para detenerse a mirar una ficción en internet. Obama ha manifestado en más de una ocasión ser un fanático de la serie, aunque eso sí ha resaltado que La Casa Blanca es un lugar mucho más aburrido a como lo pintan en House of cards. La verdad, no le creemos mucho.

En donde está en juego el poder absoluto de una nación, sobre todo si ésta es la más poderosa de la tierra, siempre habrá en sus rincones un Frank Underwood, hablándole al oído al poderoso y mirando de reojo el trono en donde se sientan los que mandan.

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Así es la nueva

Así es la nueva "Pena Máxima"; la secuela de la icónica película de Robinson y Carriazo

La ruta alterna para ir de Medellín a la Costa ahorrándose algo de tiempo y también un buen dinero

La ruta alterna para ir de Medellín a la Costa ahorrándose algo de tiempo y también un buen dinero

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--