Que el ataque a Israel por los terroristas de Hamas es horripilante, cruel, salvaje, despiadado, NADIE lo discute. Que Israel tenga el derecho a defenderse de semejante ataque, NADIE lo discute. Que Israel recurra a las mismas estrategias que el enemigo aplicó y ataque de forma horripilante, cruel, salvaje y despiadada a una población civil de palestinos residentes en la franja de Gaza, SI SE DISCUTE, SE RECHAZA, Y SE CENSURA!!
El mundo entero observa con horror y toma partido, recordando un poco el placer que producían los munera gladiatoria en el Coliseo Romano cuando se enfrentaban gladiadores y esclavos o fieras hasta la muerte para el placer de los espectadores.
Es el momento, ahora o nunca, para que el mundo, y cuando digo mundo me refiero a la humanidad, despierte esa consciencia perdida y se levante con total INDIGNACIÓN y exija respeto por la vida.
Cuando los países son incapaces de buscar, negociar y lograr eso que llaman PAZ, cuando la fabricación y mercadeo de armas supera la agricultura y la producción de alimentos, cuando las religiones y sus fantasías oscurecen la claridad del pensamiento, la capacidad de reflexión y borran la consciencia de la igualdad de los derechos y del respeto para todo ser humano, nos enfrentamos, algunos, a la pregunta de si realmente vale la pena vivir, luchar por lo que creemos justo, defender algunos valores válidos para todos, no para pocos, y si aunar esfuerzos para despertar consciencias vale la pena o no.
Hoy es un día triste, la humanidad deja de ser humana para convertirse, una vez más, en fanática de causas que ni siquiera comprende, donde la oscuridad del pensamiento y las emociones eclipsan toda posibilidad de futuro en equilibrio.
