Este no es el lanzamiento de la última versión de un teléfono inteligente, no es la promoción del último sistema operativo para móviles. Nada de esto. Es el lanzamiento de una aplicación promocionada por el Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC) que busca mejorar la red de telefonía celular del país. El video invita a reportar llamadas caídas, baja señal, red ocupada y otros problemas que como usuarios de un mal sistema de telefonía celular nos aquejan a diario.
La telefonía móvil en el país tiene la tasa de penetración más alta de cualquier otra tecnología. Las estadísticas indican que hay 98,4 celulares por cada 100 habitantes. Siguiendo estas cifras, podríamos afirmar que casi todos los habitantes del país tienen un teléfono. En la práctica, se estima que casi todos los adultos en las ciudades tienen por los menos un teléfono, algunos tienen dos o tres y en el campo, por lo menos hay una persona con un celular por cada finca.
Si bien hemos logrado una buena cobertura nos hace falta calidad. Las quejas sobre el pésimo servicio de telefonía en Colombia se cuentan por miles. Incluso aquellos que hemos padecido la experiencia de hacer fila en algún punto de servicio al cliente podemos dar fe de los innumerables reclamos. Hay algo que pone a las empresas en evidencia, al final, cuando uno ya está cansando de discutir con el funcionario de turno que nada puede hacer para solucionar el problema, este entrega una copia en blanco con el formato de un derecho de petición para hacer el reclamo. Hasta ese punto hemos llegado, en lugar de solucionar los problemas ágilmente, estas empresas acumulan derechos de petición con sus correspondientes quince días hábiles para responder, luego de los cuales se puede seguir el trámite con otra carta y una respuesta más y así sucesivamente. Los usuarios por lo general no soportamos la prueba de resistencia y claudicamos en nuestro afán de reclamación. En general el problema no se soluciona, el usuario sigue insatisfecho y la calidad del servicio sigue igual, pésima.
Cuando el gobierno, planteó un plan de choque para poner en cintura a las empresas prestadoras tras la constantes quejas, muchos pensamos que la situación habría de cambiar. Se afirmaba que a partir de la entrada en vigencia de la nueva regulación el operador estaría obligado a compensar al cliente en dinero. Eran buenas noticias y estábamos en espera de la implementación.
Por eso el anuncio de Calidad Celular por unos segundos me llenó de expectativa. El comunicado del Ministro no podía ser más claro: “tras un periodo de prueba de tres meses, y luego, con esa información y con otras mediciones, los usuarios podrán recibir compensaciones”. Luego de entrar a http://CalidadCelular.co me encuentro con la invitación a descargar e instalar una aplicación en un smartphone. Que la iniciativa del Gobierno sea una aplicación para teléfonos inteligentes simplemente nos deja con un sistema peor que la fila de dos horas en el centro de servicio al cliente.
Aun cuando la intención es buena, y la idea de un ejército de usuarios de teléfonos inteligentes, reportando las caídas de señal y construyendo el mapa de cobertura real del país, sea un mejor uso para los teléfonos inteligentes que utilizarlos para quejarse en twitter y subir fotos a facebook, esta brillante idea me llena de desconcierto, siento que es una bofetada para los millones de usuarios de a pie para quienes la plataforma se vuelve hasta ahora solo un mapa de consulta.
Que las predicciones del mercado digan que en 3 años la mitad de los móviles en el país serán teléfonos inteligentes son castillos en el aire. Seamos realistas, ¿cuántos de los teléfonos actuales en manos de colombianos son teléfonos inteligentes? ¿Cuántos de estos cuentan con un plan de datos? Y, ¿de qué tipo de planes estamos hablando? ¿Esos que solo dejan mirar el correo, chatear y chismosear en twitter o facebook con el odioso aviso al querer revisar un vínculo, una noticia o descargar un archivo que tu plan no lo permite? O, ¿de los que si dan acceso a Internet? Vayamos más allá, ¿cuántos de estos teléfonos están en la ciudad? ¿Cuántos en el campo? ¿De qué mapa hablamos? De uno donde no hay campo, solo existen las ciudades principales y de ellas las zonas donde la capacidad adquisitivas de quienes las transitan permitirían el reporte de esta información, ¿a quienes se les compensará por las llamadas perdidas?, ¿solo a aquellos que tienen un teléfono inteligente con plan de datos de Internet ilimitado? Si el Ministerio tiene estas cifras, ¿por qué propone una solución basada únicamente en teléfonos inteligentes?
Mientras pienso todo esto, sigo escuchando la voz del video: “La aplicación crea tu propio mapa de cobertura con el momento y sitio exacto donde experimentaste una caída de la llamada, una baja señal de datos o una mala calidad de la señal. Evalúa tu velocidad de descarga. Míralo con estadísticas. Califica la calidad en cada una de las llamadas y lo mejor de todo tu teléfono inteligente reporta esos datos a Calidad Celular para que los operadores hagan los ajustes necesarios ¿Muy inteligente no?”
Es irónico, parece que los teléfonos inteligentes se volvieran más inteligentes con el paso de los años, pero el Ministerio no. Es este el momento de recordarle que su responsabilidad es con todos y si acaso particularmente debería ser con los más vulnerables y no con los que más tienen.
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