A pesar de haber presentado su renuncia al embajador Carlos Urrutia le queda aún un buen tiempo por delante. Solo dejará la embajada en Washington a finales de septiembre, una vez haya concluido la Asamblea General de Naciones Unidas a la que el Presidente Santos asistirá para insistir en el apoyo al Proceso de paz con la guerrilla. Muy posiblemente en ese momento el actual embajador ante el organismo internacional, Néstor Osorio, otro hombre de toda la confianza de
Santos, quien además fue cuñado suyo, pasará a reemplazar a Urrutia en Washington.
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