Me voy!!!!.... Eso fue lo que dijo ayer al aire, el Sr. Luis Arturo Henao, estadígrafo del programa Carrusel Deportivo de Caracol, dirigido por el experimentado Cesar Augusto Londoño. No tengo por qué ocultar que el primer sorprendido de la decisión fui yo, que como oyente le escribí vía twitter, minutos antes de su reacción, para que se pellizcara en contra de una “jauría” que lo tenía azotado por muchos meses, muchos programas y domingo a domingo, en donde lo trataban de “retrasado y bruto” (son mis palabras en los dos mensajes porque así entendí la forma como refutaban sus posiciones y los conceptos que promulgaba), reaccionando así a la “matoneada” que minutos antes le habían pegado el Sr. Hugo Illera y algunos otros de sus compañeros de transmisión. Ya no son las épocas que iba a ver al Deportivo Pereira y ver en cabina a Luis Alfredo Céspedes transmitiendo y comentando en vivo con su gran equipo de trabajo del momento en la misma Caracol al lado de la querida Chila, la hincha número uno del equipo, o al mismo Cesar Augusto en Bogotá haciéndole la segunda al Dr. Hernán Peláez, el día que el un partido Santafé Cúcuta se debió aplazar por varias horas, mientras escobitas del distrito recogían en bolsas –no bananos… el matoneo no existía- pedazos de vidrios alicorados dejados por los asistentes en la noche anterior al primer concierto en Colombia del fenomenal Vicente Fernández; o al espectacular Ubeimar Muñoz sufriendo por su verde y su rojo, sin llegar a imaginarse que le podría hacer daño para el corazón. Desde esa época el recorrido de la jornada futbolera en todas las ciudades en donde había encuentros de futbol profesional era lo mejor que los hinchas del futbol teníamos, estuviéramos o no en un estadio. Pero hoy día las cosas han cambiado… la tecnología nos abrumó a todos. La inmediatez ahora si es inmediatez; todo se puede saber ya, los datos están a la mano, la información no se debe salir a buscar sino que llega (yo hace años cancelé mis suscripciones a prensa escrita y revistas), y el trato entre compañeros de trabajo se deterioró a un punto tal, que no es difícil escuchar –como ayer sucedió en la emisión del Carrusel- que palabras como “chimba”, “culo”, y frases como “la madre que te parió” los oyentes las tuviéramos que escuchar en forma reiterada y con sólo segundos de diferencia escudadas en chistes de personajes creados para el formato del programa. O escuchar al Director del programa “regañando” a uno de sus pupilos porque el celular le sonó tres veces y no le bajaba el volumen al timbre; o los chistes malos y burlescos después de la renuncia en vivo del Sr. Henao, lo que el mismo Director le tocó controlar con un “paren ya o los renuncio a ustedes”. Y cuando hablo de oyentes –así en plural- es nada más y nada menos por ver el apoyo moral de cantidades de personas que como yo, ayer sintieron lo mismo, plasmados en un sin número de mensajes por la misma red luego de que el mismo Sr. Henao denunciara al aire lo que estaba viviendo, y revelar que cada ocho días recibía correos y mensajes hasta de sus mismos compañeros de transmisión, que le tocaban el asunto. https://www.youtube.com/watch?v=HFyjlltKZ_Y&feature=youtube_gdata_player Qué pena, pero yo no iba a hablar de esa renuncia, sino de la mía… Me voy como oyente del Carrusel Deportivo que por tantos años seguí!! Porque el llamado rating que las empresas de radio muestran en cifras, son el reflejo del radio en la mano de nosotros los oyentes. Y no creo que la próxima lectura de la cifra vaya a caer mucho por mi decisión de irme, pero al menos como se lo dije ayer al Sr. Henao, las dignidades de él como profesional y la mía como oyente del programa, no se pueden colocar por debajo de un reiterado mal manejo con desviación a bordo, de las calidades de quienes conforman un equipo de trabajo muy experimentado que se deben a otros, los radio-escuchas. Y como desde ayer –con lo que le pasó al futbolista Dani Alves- los bananos están de moda, como muestra del repudio al racismo, a la discriminación y al matoneo entre personas, me uno a Neymar que se “burló” de los racistas que se lo tiraron, aclarando que lo hago en el mejor sentido de la palabra, contra los que desencadenaron la salida del Sr. Henao por una reiterado maltrato -comunicado previamente a su jefe-, desde que llegó al programa, revelado por él mismo.
