Cinco médicos del Hospital José María Hernández de Mocoa, capital del Putumayo, renunciaron; y otros diez presentaron un derecho de petición al gerente donde expresan su preocupación por la actual situación que enfrenta el departamento en el marco de la pandemia generada por el nuevo coronavirus. Estos últimos están a la espera de que se le dé respuesta satisfactoria a su solicitud o de lo contrario también podrían dejar sus trabajos.
El documento, que consta de diez puntos, muestra una radiografía de la realidad que ellos padecen al servicio del hospital local que es referente para el departamento. Entre otras cosas, allí señalan que se debe proporcionar al personal asistencial elementos de protección personal con registro Invima, aptos y aprobados para la atención de pacientes, y que cumplan con la definición de caso probable o confirmado para COVID-19 teniendo en cuenta las especificaciones mencionadas en los lineamientos para kit de elementos básicos de protección para personal de salud emitido por el Ministerio de Salud y Protección Social (junio del 2020) y las recomendaciones de EPP para personal de salud según el área de atención para COVID-19 del consenso IETS-ACIN. Así mismo, solicitan turnos de máximo ocho horas de duración en área de expansión COVID-19, un laboratorio clínico con la complejidad acorde a los servicios ofertados en área de expansión COVID-19, incluida la toma y el procesamiento de gases arteriales, entre otros.
Actualmente, los médicos se encuentran laborando bajo un contrato de prestación de servicios, el cual no supera los dos meses de plazo y que se ha venido renovando de manera habitual, en algunos casos desde hace dos años, sin tener acceso a prestaciones sociales, sin pago de recargos en horas nocturnas, sin dominicales ni festivos, y con valores que no se han incrementado desde hace más de seis años (hospitalización día, $21.000.oo; día urgencias, $22.000.oo; noche en cualquier servicio, $23.000.oo), siendo estos los salarios más bajos de los nueve hospitales del Putumayo.
Teniendo en cuenta las situaciones antes mencionadas, el inminente riesgo de adquirir la enfermedad por medio el ámbito laboral y la posible afectación psicológica y física, tanto de ellos como de sus familias, los médicos le solicitan al gerente Zúñiga soluciones reales y prontas con el fin de mejorar las condiciones laborales y reconocer el trabajo que han venido realizando durante largos años en el hospital.
Por otro lado, Manuel Zúñiga, gerente del hospital, señala que en estos momentos el hospital cuenta con treinta y tres médicos y que para suplir la vacancia de los cinco salientes ya se están contratando otras personas. Igualmente, sobre el derecho de petición manifiesta que los puntos planteados allí son materia de discusión y que en las próximas horas habrá una respuesta a los mismos; y sobre el tema de los salarios y contratos laborales dice que están revisando con el área administrativa para hacer los ajustes necesarios, eso sí, dependiendo del saneamiento financiero y fiscal.