El suroeste de Antioquia, con más de 20 municipios y cerca de 500.000 habitantes, no aguanta más la indiferencia y el impacto social y económico que la construcción de la vía Pacífico 1 genera hace muchos años.
Al día de hoy solo se ha entregado un pequeño tramo entre cuatro palos y la arenera, ahí justamente donde termina el puente de la quebrada la Maní no hay el más mínimo inicio de obra y de ahí hacia Amaga son unos pocos kilómetros que se han vuelto eternos hasta Camilo C.
Poco entiende Covipacífico que en este momento está cerrada la vía por Santa Bárbara y que todos los carros, especialemente pesados, para suroeste y el sur del país están circulando por allí.
La vía Amagá – Fredonia está con muchas restricciones.
Necesitamos que la ANI y el gobierno nacional exijan de inmediato al constructor celeridad en el proceso y mejorar las condiciones de tránsito para alimentos, productos hacia Medellín, turismo, personas en ambulancias y todo lo que día a día debe circular.
Covipacífico vulnera, agrede y ataca a los antioqueños en general y a los usuarios de la trocha.
Sin mencionar los pocos avances de los tramos que no vemos o los cierres diarios que se dan entre la huesera y la Cinifaná.
Es más grave la indiferencia de Covipacífico que la inclemencia del invierno.
Nunca se ve a la policía de carretera, y menos personal logístico de la concesión ayudando.