Natalia Orozco estaba en Corea presentando su documental Benghazi: beyond the front line, sobre el conflicto en Libia y la caída de Gadaffi cuando alguien del público le preguntó cuál era su sueño. Ella pensó un rato y respondió que quería ver a Colombia caminando hacia la paz. La idea de hacer el documental resultó casi que en ese mismo momento.
Durante un año viajó a Cuba muchas veces. No tenía una idea clara de cómo, cuándo y con ayuda de quién haría el documental pero sabía que para producirlo, y si quería contar con la participación de los protagonistas del proceso de paz, que están negociando en Cuba, tendría que ganarse la confianza de los negociadores de las Farc: Iván Márquez, Pablo Catatumbo y los demás guerrilleros con quienes nunca había tenido contacto como periodista por haber vivido en el exterior como corresponsal de medios colombianos durante diez años, trabajo con el que ganó dos veces el premio de periodismo Simón Bolívar, primero por el documental Guántanamo, ¿hasta cuándo? En el 2010 y al año siguiente por el cubrimiento de la guerra en Libia para el canal RCN.
Natalia Orozco ha realizado documentales de talla internacional como Bengazi: beyond the frontline
Natalia de regreso al país, dejó a un lado todas sus opciones laborales para zambullirse en el proceso de paz. “Cuando se silencien los fusiles”, es el nombre del documental, una producción colombo-francesa que ha contado con el apoyo de los canales RCN y ARTE, y la producción ejecutiva de Alegría Films, nominados a los premios Óscar en 2013.
Los primeros acercamientos en La Habana para hacerle seguimiento al proceso fueron en noviembre de 2012 y un año después, en enero de 2014 se hizo el primer rodaje. Desde ese momento en cada ciclo de diálogos el equipo ha estado presente en La Habana, pero ha logrado captar momentos cruciales y de gran intensidad por fuera del escenario público y formal de las negociaciones. Largas horas de trabajo protagonistas del lado de la guerrilla y el gobierno en ambientes distintos para posibilitar diálogos sinceros y de fondo. La voz de las víctimas de todos los actores armados, ejército y guerrilla está presente. Natalia tiene como tesis que lo más grave que le ha pasado a Colombia es la corrupción del poder y la indiferencia de la gente. “Por eso no está basado en la lógica de los buenos y los malos, ni en los juicios de valor, sino en la responsabilidad que todos hemos tenido dentro del conflicto: las élites, los medios, las empresas, los grupos armados”.
Jorge Enrique Botero cubrió durante 10 años el conflicto ahora prepara documental de la paz. Foto: ConfidencialColombia.com
Jorge Enrique Botero, el periodista que durante dos décadas cubrió el conflicto colombiano desde las trincheras, que mostró las imágenes exclusivas de los secuestrados detenidos en plena selva, quien logró las únicas imágenes de los tres norteamericanos en cautiverio y acompañó con su cámara innumerables liberaciones para noticieros colombianos y también para Telesur, quien además se ha ganado premios por sus trabajos como el de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano por el documental Como voy a olvidarte basado en la historia del coronel Luis Mendieta quién pasó años secuestrado por las Farc. Botero no podía estar por fuera de los sucesos de La Habana que de llegar a buen puerto cambiarán la historia de Colombia.
Botero se trasladó a vivir a La Habana, donde alquiló un apartamento desde el día uno de las conversaciones y desde hace dos años ha documentado minuciosamente todo el camino con sus altos y bajos. Inició el trabajo para un libro la editorial australiana Ocean Sur, que se le sumará a los siete títulos que ha publicado con relación al conflicto y las Farc. Botero tiene la ventaja, por sus trabajos periodísticos en el terreno de la guerra, de haber conocido vestidos con el camuflado de las Farc a la mayoría, sino a todos los comandantes de la guerrilla que están vestidos de civil en la mesa de negociación de La Habana.
La permanencia de Botero en Cuba y el material acumulado sirvieron para proponer también un trabajo audiovisual que será financiado por la productora colombiana Miracol, que además de Botero también contrató al director británico Marc Silver quien co-dirigió con Gael García la película Los invisibles. El documental cuyos derechos ya fueron adquiridos por Univisión para Estados Unidos y México, estuvo en cabeza de Isaac Lee, el director de la cadena y comenzará a rodarse en el mes de septiembre en Cuba y Colombia.
María Jimena Duzán ha entrevistado protagonistas del Proceso como Pablo Catatumbo para su libro - Foto: archivo Semana.com
Por iniciativa del gobierno hay dos proyectos caminando. La veterana periodista María Jimena Duzán fue la escogida por el propio Presidente Santos para escribir un libro sobre el proceso de paz que la periodista aceptó en tanto pudiera mantener su independencia ya que ella no lo entiende como un libro por encargo ni la versión oficial de los diálogos. Sin embargo por decisión presidencial y sobre la base de un acuerdo de confidencialidad firmado por Duzán, la periodista ha podido tener acceso privilegiado a material que no es de manejo público. Los derechos de autor de este libro ya fueron adquiridos por la editorial Penguin-Random House y el director editorial, Gabriel Iriarte, ha asumido personalmente este proyecto que también maneja con criterios de confidencialidad.
Margarita Martínez se metió en el corazón del conflicto urbano en las comunas de Medellín
Además del libro de Duzán hay un proyecto documental andando también por iniciativa del gobierno. La Oficina del Alto Comisionado de paz contrató con la periodista Margarita Martínez quien se dio a conocer por el documental La Sierra, un crudo relato audiovisual que trasmitió el Canal Caracol, por televisión comercial, sobre la vida en uno de los barrios de la comuna 8 de Medellín producto del enfrentamiento de los combos. El proyecto de Margarita Martínez titulado Heridas de Guerra, se concentra en el aspecto humano de los militares que, según ella, entienden la paz y la guerra de una manera distinta a los civiles y que tiene efectos diferentes en la dinámica de sus vidas.
El éxito de estos cuatro proyectos, todos de gran envergadura dependen de una sola cosa: que se firme la paz. Todos están calculados para estar listos en el momento en que el acuerdo del gobierno Santos y la guerrilla de las Farc sea una realidad y todos, conocedores de primera mano de la dinámica de los diálogos, están trabajando en la perspectiva de una fecha: primer trimestre del 2016.
