Un sueño periodístico contra la corrupción cuyo lema será este proverbio chino: “Si no quieres que se sepa, no lo hagas”.
Innumerables personas, que han seguido de cerca mis recientes investigaciones sobre la vasta corrupción y el intrincado gobierno del crimen organizado en La Guajira, me piden a diario interesarme en la perdición de otras regiones del país, donde, aseguran, los fondos locales, el gobierno civil, la fuerza pública, la justicia y los entes de control están tomados armoniosa e integralmente por el hampa.
Hablan principalmente de todos los departamentos de la Costa Norte, Chocó, los santanderes, Antioquia, la región amazónica íntegra, Nariño, Arauca, Cundinamarca y Casanare.
Lo mismo que en La Guajira, en todas aquellas regiones, desde el poder civil formal se ordenan asesinatos que la justicia local archiva de manera metódica y complaciente. No existen gastos oficiales que no rueden por toboganes de corrupción a lo largo de los cuales el dinero del erario desaparece a la luz del día y al final solamente llegan algunas pocas monedas a la salud pública, la educación, la infraestructura, cada vez más rezagada, y al mal vivir de la infancia, llamado “bienestar familiar”. La consecuencia de todo esto es el atraso, la injusticia, la postración social y la miseria, principalmente la infantil.
Las llamadas “altas cortes”, por lo que vemos y sabemos, cada vez son más alcantarillas por las que la descomposición moral rueda contenta y sin tropiezos. Y organismos como la Procuraduría o la Contraloría, también llamados “de control”, son trincheras de la podredumbre moral, política y del fanatismo religioso.
Guardo diversas invitaciones a investigar, por ejemplo, lo que mis corresponsales llaman “cupos electorales”. Según ellos, son paquetes de tres mil votos cada uno que venden contactos de la Registraduría. Los candidatos inscritos pueden comprar todos los paquetes que deseen y al comenzar la jornada electoral arrancan con ventajas tan grandes como las puedan pagar. Esto ayuda a explicar por qué los cargos de representación popular quedan y siguen quedando en manos de criminales.
No existe en Colombia, de acuerdo con quienes me informan, una sola actividad ilegal que no esté aliada a la justicia, la fuerza púbica, los entes de control y el poder local formal: desde la minería, la cocaína y la gasolina de contrabando, hasta los carteles de la contratación, las apuestas, la prostitución, el manejo de basuras, las bandas criminales, la trata humana, el asalto a mano armada, el cuatrerismo o el tráfico de armas, pasando por el turismo sexual con menores de edad, el tráfico de fauna, el secuestro extorsivo o el genocidio. Tanto es así que en pueblos y departamentos enteros (escoja usted el que quiera) no hay quien no abunde en descripciones y solloce por el peso apabullante del imperio del crimen organizado, excepto las propias autoridades que deberían combatirlo.
Esta no es una nota de opinión sino una convocatoria que lanzo, animado por amigos que me insisten en hacerla.
Se trata de lo siguiente:
Formar un grupo básico de cinco periodistas y cinco abogados para dividirlo en cinco equipos de un periodista y un abogado cada uno. El país se dividirá, también, en cinco partes y cada equipo se encargará de investigar y denunciar de manera sistemática la corrupción y a los criminales que la ejercen en la zona que le haya correspondido de común acuerdo.
Si usted tuviera interés en colaborar de alguna manera con este proyecto, que se llamará “Espantando Cucarachas”, puede escribirme a [email protected] Este proyecto también se apoyará en la cuenta de Twitter @AntiCucarachas Puede seguirla desde ahora.
La meta constante de “Espantando Cucarachas” será divulgar corruptelas en escritos periodísticos y documentales audiovisuales, así como judicializarlas y litigar hasta cuando se logre justicia en cada caso.
El nombre del proyecto pretende honrar la memoria del recordado maestro del periodismo Ryszard Kapuściński, cuyo postulado fue: “El trabajo del periodista no consiste en pisar las cucarachas, sino en prender la luz para que la gente vea cómo las cucarachas corren a ocultarse”.
Quienes quieran tener una idea del trabajo inspirador de esta convocatoria, los invito a leer este artículo que publiqué recientemente en Las2Orillas:
http://bit.ly/1PbPxIA; a ver este tráiler: http://bit.ly/1bcvRrk; o esta entrevista: http://bit.ly/1flONUm
Eso es todo y muchas gracias.