Para sorpresa de muchos y alegría de otros, James Rodríguez ha sido llamado de nuevo a la selección. El técnico Reinaldo Rueda y su equipo asesor consideran que el jugador tiene los méritos para hacer parte del combinado que nos enfrentará a Brasil como visitantes y a Paraguay en Barranquilla. Las citas camino a Catar 2022 son el 11 y 16 de noviembre, respectivamente.
La noticia no es solo el regreso del 10 a la selección, sino que abre una discusión con varias preguntas: ¿Está James realmente a punto como para aportar al equipo?, ¿lo demostrado hasta ahora en Al-Rayyan es suficiente para ser tenido en cuenta, quitándole oportunidad a otros? y, sobre todo, ¿el llamado se debe estrictamente a méritos deportivos o pudo más la presión social y las redes sociales a la hora de rescatar a un ídolo caído en desgracia?
En la liga árabe, lo más reciente es que James viene de ser expulsado y en estudio están las fechas que tendrá que estar suspendido por intentar agredir al árbitro. Más allá de que varios medios cataloguen de 'deslumbrante' el desempeño del jugador, su rendimiento es uno más en una liga menor (actuaciones sin transcendencia y un solo gol).
Sin el ritmo de competición deseado y aún desorientado por lo lejos que está de su mejor versión, lo cierto es que la presencia del 10 no parece tan necesaria, menos cuando la selección marcha cuarta en la clasificación general y, mal que bien, tiene un pie puesto en la cita mundialista de noviembre de 2022.
Por otro lado, los medios han recogido que la aparición de James en el equipo no es del todo bien recibida, pues puede afectar lo que tanto ha costado y viene dando sus frutos: una mejora en el rendimiento y en el ambiente interno del grupo.
Se dice que probablemente Rueda considere darle unos buenos minutos al volante cucuteño en dos partidos que son absolutamente claves para afianzarse en la tabla, luego de tres empates que arrojaron 3 puntos de 9 posibles. Y aunque el encuentro con Brasil se hace especialmente difícil, en el fútbol no hay nada escrito y Colombia puede dar una sorpresa. En ese escenario de urgente necesidad James aparecerá de nuevo para alegría de esos tantos seguidores que desde redes sociales lo vienen pidiendo a grito herido, lo que no siempre concuerda con un estado óptimo y realista para lo que se le pide a un volante de la selección nacional. Se acaba 2021 y continúa la novela del jugador.
El próximo noviembre ya estarán las selecciones clasificadas para el Mundial catarí y James tiene menos de un año para convencer con su fútbol que tiene un lugar en el combinado nacional y que eso contribuyó a ser protagonista de la gran cita mundialista. Esta puede ser su última oportunidad.