Según un estudio de la ONG Transparencia Internacional, Colombia fue catalogado en este 2020 como el país más corrupto del mundo, un vergonzoso título que se basó en el estudio a 180 países. Por esto los entes de control como la Contraloría y Auditoría General de la República buscan mecanismos para hacerle el quite a este flagelo.
En esta emergencia sanitaria ha sido evidente los malos manejos de algunos gobernantes que se quieren aprovechar de la situación y hacer su agosto con los recursos de los colombianos, a los cuales el proyecto Transparencia para la emergencia le ha puesto la lupa.
“Nosotros como contraloría territorial cada 8 días le estamos entregando un informe a la Auditoría, donde les manifestamos que hemos adelantado en esa semana respecto a las denuncias y procesos de investigación de contratos covid-19”, dijo Carlos Fernando Pérez, contralor departamental de Santander.
Un trabajo articulado de los entes de control que han logrado anular contratos por $3.200 millones de pesos por presuntos sobrecostos en la contratación para atender la emergencia sanitaria generada por la pandemia del coronavirus.
“Como sabemos la Auditoría General de la República ejerce control y vigilancia fiscal a las contralorías territoriales en tiempo real y de manera permanente a las contrataciones celebradas por la modalidad de urgencia manifiesta que han venido ejecutando las entidades del nivel territorial en todos los rincones del país”, señaló Alma Carmenza Erazo, auditora general de la república.
Asimismo, los entes de control reiteraron el llamado a los funcionarios públicos para que le den un buen manejo a los dineros destinados para atender esta pandemia.