Más de 300 familias damnificadas luego de las avalanchas que casi destruyeron Mocoa en 2017 deberán esperar al 2022 para tener su casa nueva. La Contraloría General de la Nación hizo una visita a la capital del Putumayo donde encontró que el Gobierno no cumpliría la promesa a los mocoanos de terminar la construcción de casas y recuperar el acueducto del municipio.
El principal problema está en la construcción de viviendas. En febrero, el Gobierno en cabeza del ministerio de Vivienda y la Unidad de Gestión del Riesgo, se comprometió a entregar 100 casas en septiembre y 290 a final de año. En una reunión con la Contraloría este miércoles, la cifra cambió a 72 casas en octubre y 216 en diciembre, pero en el predio donde se construirían estas últimas no hay ningún avance.
Para colmo, algunas casas que se salvaron de las avalanchas de 2017 todavía siguen habitadas a pesar del riesgo. Además, tampoco ha habido avances significativos en el proceso de reconstrucción del acueducto, por lo que Mocoa lleva más de cuatro años sin agua potable.
En visita al proyecto de vivienda Sauces II, en la capital de Putumayo, la @CGR_Colombia evidenció importantes retrasos en el avance de la obra, que impiden que estos inmuebles sean entregados en los próximos meses. #CadaPesoCuenta
— Contraloría General (@CGR_Colombia) July 29, 2021