El Aeropuerto del Golfo de Morrosquillo debe su nombre a la ubicación geográfica del municipio donde está ubicado, Santiago de Tolú, el mismo en el que el actual senador Miguel Polo Polo intentó, sin éxito, llegar a la Alcaldía en 2019 y que está a escasos 35 kilómetros de la capital de Sucre, Sincelejo.
Es un terminal aéreo pequeño con una pista que solo tiene 1.350 metros de largo y 16 metros de ancho y al que solo llegan dos aerolíneas. Una es Clic, antes EasyFly, que lo conecta con el Aeropuerto Olaya Herrera de Medellín y la otra, la estatal Satena, que además de la capital de Antioquia, también tiene una ruta hacia el Puente Aéreo de Bogotá.
La idea del gobierno de Gustavo Petro es que más turistas puedan llegar a este municipio y por ello destinó $ 123.000 millones para remodelar el aeropuerto. El proyecto consiste principalmente en ampliar la pista para que alcance 2.200 metros de largo y 45 metros de ancho con el objetivo de que puedan llegar aviones de mayor tamaño y, por ende, con mayor capacidad de pasajeros.
Las empresas que conforman el consorcio al que le adjudicaron el contrato
La Aeronáutica Civil, en cabeza del exgerente de Transmilenio Sergio París, escogió al Consorcio Aeropuerto Tolú SC para llevar a cabo las obras correspondientes al Aeropuerto de Tolú. Está conformado por KMA Construcciones, manejada por la familia Amín de Cartagena, quienes son considerados los zares del negocio de los peajes en el país, por Sonacol Solarte Nacional de Construcciones S.A.S. y por la Constructora LHS, ambos del Grupo Empresarial LHS.
*Esta nota fue actualizada el 12 de diciembre a las 12:08 p. m. La constructora Sacyr Concesiones no se presentó para participar en la licitación de la obra y no hace parte del consorcio.