Lo que quiero mostrar es que en las fuentes del Islam hay una idea de la dignidad de la mujer que después de perdió.” Assia Djebar[i]
Cientos de mujeres se han quitado el hiyab[ii] como señal de protesta por el asesinato de Masha Amini, una joven de 22 años quien, de acuerdo con lo publicado en su cuenta de Twitter por el consejero de seguridad nacional del presidente Joe Biden, Jake Sullivan, “fue golpeada bajo custodia por la policía de la moralidad de Irán” muriendo tres días después de entrar en coma en sus instalaciones.
Masih Alinejad quien es una periodista, bloguera y escritora iraní ha sido una de las más fuertes críticas de las autoridades de su país, lo que la obligó a vivir en el exilio en Nueva York en donde, antagónicamente, le han sido reconocido sus esfuerzos con múltiples premios relacionados con los derechos humanos[iii]. Respecto a este último evento escribió en sus redes sociales: “A la edad de 22 años, en la plenitud de su vida, Masha Amini fue brutalmente golpeada por la policía moral en Irán solo porque su cabello se veía a través de su hiyab. Mahsa, que entró en coma, falleció hoy”.
Medios de comunicación persas, como la web IranWire o el diario Shargh Daily, recogieron declaraciones de la familia de Masha quienes afirmaron que había sido transportada al hospital en coma horas después de su arresto y que ahora estaba muerta.
En contraposición, la televisión estatal señaló que “por desgracia, falleció y su cuerpo ha sido transferido al instituto médico-legal” acompañando la transmisión con extractos de un video en el que se ve una sala de una comisaría en donde se presenta a una mujer como Masha quien se levanta para discutir con una “institutriz” y después se desploma. La policía confirmó el deceso en un comunicado destacando que “no hubo contacto físico” entre los agentes y la mujer.
Irán, que alguna vez fue considerado el imperio más lujoso del mundo, se encuentra hoy en día bajo el dominio religioso y político del islamismo con el controvertido ayatolá Alí Hoseiní Jamenei como Líder Supremo de la República, sucesor del famoso ayatolá Jomeini quien falleciera en junio de 1989.
El ayatolá Jomeini, líder de la llamada Revolución Islámica ocurrida en 1979, considerada uno de los eventos más significativos de la historia reciente de la humanidad, derrocó al último sah de Irán, Mohammad Reza Pahleví, adueñándose del gobierno al nombrarse Líder Supremo de la recién creada República, posición concebida a su medida en la Constitución escrita por él mismo, que lo convirtió en la autoridad política y religiosa de más alto rango de la nación, cargo que ocupó hasta su muerte.
Bajo su régimen se introdujo la Sharia (ley islámica) cuyo cumplimiento es vigilado por la Guardia Revolucionaria especialmente en lo referente al código de vestimenta en el que las mujeres deben cubrirse el cabello y los hombres tienen prohibido usar pantalones cortos[iv].
Según Janet Afari, "el régimen recién establecido del ayatolá Jomeini se movió rápidamente a reprimir a las feministas, las minorías étnicas y religiosas, los liberales y los izquierdistas, todo en nombre del Islam"[v] todo lo cual hizo en poco tiempo retroceder al país a la Edad Media dejando los 2500 años de historia del Imperio persa en el pasado.
Hoy en día resulta cotidiano encontrar a la policía “moral” iraní conduciendo por toda la ciudad vigilando la vestimenta de las mujeres, “estudiando detenidamente cuántos mechones de cabello tiene a la vista, la longitud de sus pantalones y su abrigo y la cantidad de maquillaje que lleva”, y, en cuanto detectan a alguna que incumpla la medida, “el castigo por dejarse ver sin velo en público puede ser de detención, pena de prisión, multa o latigazos. Todo eso por el “delito” de ejercer su derecho a llevar puesto lo que quieran” [vi].
Son muchos los expertos, sobre todo los pertenecientes a la corriente del islam reformista como el teólogo egipcio Nasr Abu Zayd, que subrayan que el Corán no prescribe el uso del hiyab sino que simplemente ordena la modestia, la decencia y el pudor a la hora de mostrar públicamente el cuerpo.
Sin embargo, mientras quitarse el velo continúe siendo un delito punible en Irán, gestos valientes e históricos como la protesta que se ha alzado en memoria de Masha Amini llamarán la atención del mundo hacía este régimen musulmán cada vez más alejado de lo expresado por el ayatolá Joemini en la entrevista sobre política exterior dada a The Guardian en París el 6 de noviembre de 1978:
“Las mujeres son libres en la República Islámica en la selección de sus actividades, su futuro y su vestimenta".
Referencias
[i] Escritora, novelista, dramaturgo, traductora, cineasta y profesora argelina. Autora de "Sed" (1958), "Impacientes" (1958), "Hijos del nuevo mundo" (1962), "La alondra ingenua" (1967), "Lejos de Medina" (1991), "Sin habitación propia" (2008).
[ii] Pañuelo que las mujeres musulmanas utilizan para cubrir sus cabellos y, a veces, su cuello.
[iii] En 2015 le otorgaron el de UN Watch por los Derechos Humanos de Ginebra, el Premio de Periodismo Omid de la Fundación Mehdi Semsar y el AIB Premio de Excelencia de los Medios de comunicación.
[iv] John Pike. «Global Security, Intelligence: Niruyeh Moghavemat Basij – Mobilisation Resistance Force». Globalsecurity.org. Consultado el 19 March 2010.
[v] Afari, Janet (2010). Foucault and the Iranian Revolution: Gender and the Seductions of Islamism. University of Chicago Press. p. 163. ISBN 978-0-226-00786-1.
[vi] http://barbiegirltravelsarts.com/2019/06/04/el-hiyab-y-la-revolucion-islamica-en-iran/#:~:text=El%20Hiyab%20%28velo%29%20y%20la%20revoluci%C3%B3n%20en%20Ir%C3%A1n,de%20la%20cara%20y%20no%20impide%20la%20comunicaci%C3%B3n.