Como es cultura y tradición, las flores forman parte del homenaje que se les rinde a los seres queridos cuando fallecen. Data de los rituales griegos, en los que las flores representaban todo lo bello de la vida, haciendo de un momento como la muerte, un instante más armónico y llevadero en medio del duelo y la pena. Pero en la actualidad, ¿qué pasa con este material orgánico que se deja en los cementerios?
Por norma y respeto a los familiares, las flores que dejan en el lugar y que no son cambiadas regularmente, son retiradas por un equipo especializado luego de 30 días (en promedio), pues es el tiempo en el que comienzan a marchitarse. Es ahí en donde inicia el aprovechamiento del material orgánico.
El proceso llamado compostaje que tiene una historia de más de 4.500 años, consiste en la degradación de los residuos de manera química natural ayudada por microorganismos o por lombrices, hormigas, escarabajos, caracoles, babosas, milpiés, entre otros, permitiendo que ese material se convierta en abono.
Para el caso del parque cementerio de Grupo Recordar, ubicado en Bogotá, se recolectan anualmente 100 toneladas de basura, de las cuales el 90% son procesadas a través del compost, utilizado a su vez para la jardinería interna y para la reforestación de la infraestructura. El 10% restante es reciclado según las normas ambientales.
En cuanto al proceso, se utiliza material vegetal de los arreglos florales, hojarasca y poda de jardines, el cual se amontona en pilas, para luego aplicar cal en pequeñas cantidades lo que permite regular el PH. Después se añade melaza disuelta en agua lo que favorece la reproducción de los microorganismos responsables de la descomposición.
Esta pila se cubre con un plástico negro con el objetivo de aumentar la temperatura y favorecer las condiciones de maduración. Además de eso, cada 4 días, se emplean 40 litros de agua con la finalidad de mantener la humedad, pero solo después de 20 días se realiza la primera aireación que ayuda a reducir los olores, después de esto, se repite el procedimiento cada 15 días. Cuando se obtiene el material descompuesto, se procede a empacar para su posterior utilización. El proceso completo y, dependiendo de la cantidad de material orgánico, puede durar hasta 60 días.
De esta manera, el compostaje se establece como una buena práctica de responsabilidad ambiental que emplean algunas empresas en Colombia y que evitan, entre otras cosas, que el material vegetal sea dispuesto en un relleno sanitario, pues según estudios, podrían ser provechados en más del 53%.
Otro de los beneficios de realizar este proceso de reutilización es que permite mejorar la estructura del suelo, facilitando el crecimiento de las plantas y evitando la proliferación de hierba mala. Según la guía técnica para el aprovechamiento de residuos orgánicos a través de metodologías de compostaje realizado por la Universidad Nacional, más del 50% de los desechos que generamos en nuestros hogares son de tipo orgánico y, de este el 70% pueden ser reutilizables.
¿Cómo hacer compostaje en casa?
El compostaje casero es una alternativa para hacerle frente a la cantidad desmedida de residuos generados en los hogares, pues se producen cerca de 6.300 toneladas diarias, según el distrito. Este proceso se caracteriza por ser sencillo, seguro y eficiente.
Para almacenar los desechos se puede utilizar una caja, madera o plástico. Las cáscaras o semillas de las frutas y vegetales; las flores, cascaras de huevo, césped podado, ramas o material de jardín, son ideales para hacerlo.
El montaje está constituido por 4 capas; la primera deberá tener materiales secos, la segunda y tercera materiales húmedos. En la capa base se recomienda poner ramas y hojas; en la segunda restos de cocina (siempre lo más picado posible, todo debe estar en pequeñas partes). En cuanto a la cantidad de cascaras de frutas cítricas, es mejor que se encuentren en menor proporción ya que estas disminuye el pH lo cual inhibe el buen funcionamiento de los microorganismos.
La tercera está constituida por residuos de poda como césped, hojas o tallos de plantas recién cortadas y, por último, una de tierra de jardín, que asegurará la existencia de microorganismos. Se recomienda verter agua una vez por semana y revolver los residuos dos veces cada 7 días.
Es importante que se ubiquen en un lugar al aire libre donde los residuos reciban sol y sombra a lo largo del día para elevar la temperatura y mismo tiempo mantener la humedad relativa.
¿Cómo saber si el compostaje está listo?
Se debe observar un cambio de coloración a un tono más oscuro. La obtención del compost para climas cálidos puede ser de tres semanas aproximadamente, para climas fríos como Bogotá se tarda de cinco a seis semanas. Luego de este cambio, ya puede ser utilizado para el abono de las plantas del hogar e incluso como un proyecto entre vecinos para huertas o jardines comunales.
Este tipo de soluciones nos demuestra que todos en menor o mayor medida podemos hacer algo por el medio ambiente.