La manipulación de las encuestas es una de las más perversas formas de hacer fraude en unas elecciones. Y Colombia, reina de la trampa política, lleva la delantera en este tipo de farsa.
La intención de quienes manipulan las encuestas por orden de quien las paga (el que encuesta gana), no es otra que la de inducir al electorado a seguir la campaña o las campañas que llevan la delantera. Todo porque los políticos y los encuestadores saben de nuestro triunfalismo tropical, ese que nos hace subir siempre al bus que va adelante y no en el que va atrás o en el medio. La explotación pura de la idiotez y el esnobismo.
Les voy a demostrar cómo se manipula un resultado. Empecemos por analizar la última encuesta polimétrica de Caracol radio elaborada por la firma Cifras y Conceptos.
En dicha encuesta el resultado fue el siguiente:
Santos 27%
Zuluaga 19%
Voto en blanco 17%
Peñalosa 10%
Clara López 10%
Marta Lucía 8%.
Hasta aquí, nada raro. Gana Santos, sube Zuluaga, el voto en blanco se mantiene al igual que Peñalosa, Clara y Marta Lucía. Resultado, la gente se quedará con la sensación de que Santos, a pesar de no tener la fuerza para llegar al 51% es seguro jugador en segunda ronda y que, los demás, se la juegan por pasar a la elección definitiva de junio, con la seguridad de que en esa instancia, aparecerá el toconsan (todos contra Santos) que los lleve a la presidencia.
Manipulación por segmentos de edad
Desmenuzando la ficha técnica encuentra uno las incongruencias. La primera, los segmentos de edad en los que recogieron las muestras:
Si analizamos con cuidado, nos damos cuenta que los jóvenes entre los 18 y los 25 años, edades entre las que se encuentra el 90 % de estudiantes universitarios, que son los más activos y los más críticos en política, solo fueron encuestados en un 9 % cuando según el Dane en ese grupo poblacional se encuentra el 12 % de la población. Curiosamente, en este segmento se encuentran las mayores votaciones de la izquierda, el voto en blanco y Peñalosa.
Sin embargo, el segmento de los 46 a los 55 años fueron encuestados el 14 % mientras el censo dice que en ese grupo hay solo el 10 % de colombianos.
De los 56 a los 65 años fue encuestado el 14 % mientras el Dane dice que entre esas edades solo hay un 8 % de habitantes.
Y lo más dudoso, entre los mayores de 65 años, que en Colombia solo son el 8 %, hubo un 12 % de encuestados.
¿Y quienes están en esos segmentos adultos mayoritariamente encuestados? Los señores y señoras que temen al cambio y que siempre han sido fieles a sus partidos y caudillos es decir, Santos y Uribe (Zuluaga). Más clara no puede ser la manipulación. Si quiero que ganen Santos y Zuluaga encuesto a los adultos mayores que es donde están la mayoría de simpatizantes de esas candidaturas.
Manipulación por estrato
Pero lo anterior no es lo más grave. Lo más grave es el estrato alto consultado en la encuesta.
Dicen la Registraduría, un documento Compes y el Dane que en el estrato medio alto hay 1,9% de colombianos y que, en el estrato alto hay 1,2% de colombianos, es decir, podríamos hablar, exagerando, de un 3,1 % de ricos en Colombia. Y resulta que la encuesta polimétrica consultó un 14 % de ricos. Es decir, un 500 % más de los que hay ¿Y por quién votan los ricos en Colombia mayoritariamente? Nuevamente por Santos y por Uribe (Zuluaga) que son los que les garantizan, la estabilidad económica que ya tienen pues ellos mismos los han venido asustando con la inseguridad y el castrochavismo, que si es nefasto pero que en Colombia estamos muy lejos de adoptar. Ni siquiera en los diálogos de La Habana se ha tocado el modelo económico del país. Nunca se ha dicho que se restringirá la libertad de empresas ni que habrá expropiaciones ni juicios a los ricos, pero ese es el terror que infunde el santo-uribismo para que el país los siga eligiendo.
La inflada de Datexco a Peñalosa
Pero no solo, Santos y Zuluaga han sido inflados. En la encuesta Datexto de marzo, el inflado fue Enrique Peñalosa. Recuerden ustedes que, a raíz de este resultado, la revista Semana le dio portada y gran titular al candidato del partido verde: “Ave Fenix”.
La manera de hacerlo fue más elemental. La firma tomó en Bogotá el 38 % de la muestra mientras que la capital solo incide electoralmente en un 20 %. En esta encuesta, al contrario de lo sucedido en la de Cifras y Conceptos que acabamos de analizar, el segmento de los 18 a los 24 años tiene un peso del 35, 5 %. Recordemos que en la anterior solo un 9 %. Para tener un punto de referencia, distinto al del Dane, este segmento en las encuestas de Gallup pesan el 15,8 % y en la Ipsos el 18 %.
La desinflada del voto en blanco
Y ya para terminar, les muestro lo sucedido en la encuesta de febrero en la firma Cifras y Conceptos donde el Voto en Blanco aparece con un 30 % de favoritismo cuando en la suma del porcentaje en las seis regiones que aparecen en la ficha técnica, cualquier niño de primaria puede sumar y dividir por seis para encontrar que el real resultado de esta encuesta era 42, 8 %.
Queda demostrado que los encuestadores y sus clientes manipulan al electorado a su antojo y lo inducen, con información equivocada, a seguir a sus clientes. Y las autoridades electorales que se ganan millonadas en sueldos y privilegios, mudas. No hacen nada. Como si la cantidad de asesores que tienen a su servicio no se pudieran sentar a realizar este ejercicio que el suscrito, el peor matemático de la tierra, pudo hacer con una simple calculadora del celular. Pero claro, ¿qué se puede esperar si todos los magistrados del Consejo Nacional Electoral pertenecen a los tres partidos que apoyan al presidente Santos y que son los mismos que se reparten la mermelada, léase, billones de pesos de libre y corrupta destinación?
Colombianos, hasta cuándo vamos a permitir que nos sigan metiendo los dedos a la boca. Ya está bueno de aguantar. Ya está bueno de dejarles pasar tantas fechorías. Tengamos una gota de dignidad.