Uno de los mayores problemas sino el mayor en Bogotá es el de la movilidad. La principal causa de esta problemática en la ciudad es que la mayoría de los empleos y cupos de educación superior se encuentran en una zona que es 1/30 de la ciudad, Bogotá esta extremadamente “chapinerizada”. Para ser exacto esta zona está entre calles 100 y 10 y carreras 6 y Caracas-autonorte.
El segundo gran problema son los horarios, la mayoría de la gente se mueve a las mismas horas. En 2003 una reforma laboral que paso la jornada laboral diaria permitida de 8 a 9 horas le dio un duro golpe a la clase media y humilde, pero sobretodo un golpe devastador a la movilidad de Bogotá. Esta reforma elimino casi por completo horarios de salida de 4 pm y de llegada de 9 am, igualmente desapareció el horario 6am -2pm. De esta forma las personas que entraban a trabajar entre 6 y 9 am pasaron a hacerlo entre 7 y 8 am y los mismos que salían entre 2 y 6 pm pasaron hacerlo solo entre 5 y 6pm.
El tercer gran problema es transmilenio, hace 15 años la ciudad cometió un inmenso error al escoger un sistema económico de hacer, peor aún, realizarlo de forma tacaña, y como se sabe es más fácil construir de cero que reparar. A quién se le ocurrió aceptar unos diseños de la Caracas con dos y hasta 4 semáforos por estación, algunas con semáforos a sus dos extremos, sabiendo que sería el corazón del sistema, sin contar el relleno fluido, tamaño subdimensionado de estaciones y pisos que al año estaban destruidos (70% de las estaciones de la fase 1 han sido o necesitan ampliarse). Portales como el de la 80 y norte son ejemplo de “odas al mal diseño” y de cómo no hacer un portal. (No en vano el director del IDU en esa época se encuentra en la cárcel en este momento). Como si fuera esto poco las subsiguientes administraciones han seguido su expansión.
Resumiendo en una sola frase. Bogotá se mueve a las mismas zonas, a las mismas horas, en un sistema que simplemente nunca tendrá capacidad para eso.
Ahora es tiempo de las soluciones, lo primero a decir es que no hay soluciones mágicas o económicas y muy pocas inmediatas. Ningún cambio de rutas de transmilenio hará que este funcione mejor. Las soluciones las expongo a continuación.
1) Reducir la jornada laboral de 48 a 39 horas semanales.
Al realizar este cambio muchas personas empezarán llegarán al trabajo a las 9 am y otras saldrán a las 4 pm, reaparecerá el horario sin hora de almuerzo de 1-2pm, lo que haría que la afluencia en horas pico baje por lo menos 20%. Esta es la única acción de impacto inmediata y está solamente en manos del presidente de la república, de todas las soluciones es la más importante.
2) “Deschapinerizar la ciudad”
Hay que crear centros empresariales y de educación en localidades como Bosa, Engativá, Suba, Kennedy y en municipios cercanos como Funza y Mosquera, esto contribuiría a hacer los recorridos de las personas mucho más cortos. (Así logra funcionar Tokio con 35 millones de habitantes, con localidades autosuficientes). Mucho de esto estaba en el nuevo POT que se encuentra suspendido, ya que el antiguo POT no permite el uso de suelos en estas localidades de la forma necesaria para que surjan estos centros empresariales. De otro lado densificar y aumentar el número de viviendas en localidades como Chapinero, Barrios unidos, Centro, Teusaquillo y Antonio Nariño contribuiría bastante.
3) Metro
Bogotá no necesita 1 sino por lo menos 4 líneas de metro, para tal fin el gobierno nacional debe asegurar los recursos de forma inmediata para financiar antes de 2025 el 80% de las siguientes 3 líneas. Para hacer una comparación Moscú una ciudad de tamaño similar a Bogotá cuenta con 13 líneas de metro, Santiago con menos de la mitad de población tiene 2. Probablemente la segunda línea del metro debería partir en Suba, pasar a la 80 por ciudadela Colsubsidio y de este punto ir en diagonal hasta el parque nacional donde bajaría hasta la candelaria.
El metro es indispensable es el medio más rápido de trasporte terrestre en la ciudad, por eso todas absolutamente todas las ciudades ejemplo de trasporte en todo el mundo, cuentan con varias líneas de metro y ninguna con transmilenio.
4) Salvar Transmilenio
Hay que hacer lo que se propuso hace 15 años cuando se decidió hacer este sistema y la tacañería no dejó, la Caracas debe ser subterránea entre calles 76 y 26, con 3 carriles en las estaciones y 2 en el resto (en cada sentido), estaciones más largas algunas más anchas otras. (El concejo en un acto de no creer negó inexplicablemente este proyecto).
No es lo único por hacer. El sistema ha sido visto de forma compleja (el todo es más que la suma de sus partes), debe empezar a verse de forma sistémica, dividiendo transmilenio en pequeños subsistemas y analizando los problemas pequeños de cada uno de estos. Por ejemplo ampliar la curva de salida del portal 80 una inversión de 20 o 30 millones podría representar ahorro de hasta 2 minutos por viaje; como esta, solucionar muchas cosas que parecen insignificantes pueden ayudar enormemente la eficiencia del sistema.
5) Sistemas férreos
El tren de cercanías y tranvías son indispensables para lograr una armonización de todo el trasporte de la ciudad.
El gobierno Santos en campaña se comprometió con Bogotá a financiar por lo menos 70% de metro, el transmilenio por la Boyacá, metrocables y reparación de la Caracas. Esta semana al conocerse el costo de la línea 1 del metro, lo primero que salió a decir el gobierno nacional es que NO podría cumplir esas promesas y que solo podría cumplir con el metro, con lo cual concejales y congresistas de Bogotá reaccionaron indignados. Acaso el presidente estaba improvisando con sus promesas en campaña?
Como se puede notar solo una de las 5 soluciones que deben ser implementadas en conjunto, tiene efectos inmediatos y como otras no depende para bien o para mal del alcalde de turno sino del presidente. De otro lado los costos son cuantiosos, 60 billones aproximadamente, Bogotá no puede costear sola esta cifra ni cercanamente, la nación debe cooperar de forma onerosa. Por supuesto no son las únicas soluciones pero sí las más relevantes y necesarias, siempre existirá espacio a la innovación.
